El presidente Mauricio Macri asistirá a la celebración por el Día de la Bandera aunque cambió los esquemas tradicionales del evento. El nuevo gobierno nacional modificó ciertas pautas protocolares y en esta oportunidad se decidió que Macri sólo participe 45 minutos de la celebración y no otorgue un discurso masivo frente a los ciudadanos.  

Según el cronograma, el presidente llegará al helipuerto de Prefectura Naval Argentina, ubicado en avenida Belgrano y Sargento Cabral cerca de las 10.45. Posteriormente será secundado con una fuerte custodia de agentes federales, militares y seguridad de presidencia para trasladarse hasta los pies del Monumento.

Así, el presidente limitará su presencia a la toma de promesa de lealtad a la bandera de unos cuatro mil chicos de escuelas y luego están previstos en el Patio Cívico del Monumento los discursos de la intendente Mónica Fein, el gobernador santafesino Miguel Lifschitz y al cierre, el presidente Macri brindará un saludo pero no en un escenario ni con militancia en los alrededores.

De esta forma se aleja de las participaciones de Cristina Fernández quien en varias oportunidades dio discursos extensos con matices políticos ante una multitud de personas.

Justamente, cuando se puso en duda hace unas semanas la presencia de Macri en la celebración, uno de los fundamentos que transcendieron es que se evitaba exponer a Macri ante miles de personas que puedan agraviarlo con cánticos o generar la reacción de la gente ante la coyuntura económica.

Incluso desde la cartera de Seguridad nacional le habían aclarado a la municipalidad de Rosario que la prioridad de protocolo es que el presidente no concurra a eventos al aire libre o a lugares que no se le garantice la seguridad al presidente.