Las llamadas se cortan, la señal es floja, internet no engancha. Estos son algunos de los problemas de telefonía celular que generalmente responden a la saturación de las antenas. Es por eso que la Municipalidad de Rosario y el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) firmarán este lunes un convenio de colaboración y asistencia técnica para la instalación de nuevas torres pero con un marco jurídico de controles adecuados.

Entre las modificaciones que plantea la iniciativa, establece la creación de un registro único de operadores de servicios, obliga a los propietarios de antenas a identificar las mismas y presentar un plan anual de instalaciones, y determina que solo profesionales habilitados pueden realizarlas.

"Es fundamental modernizar la legislación, avanzando en una normativa superadora que incorpore nueva tecnología, mejore las comunicaciones móviles, contribuya a expandir la red y desterrar los mitos sobre las antenas; siempre a partir de un control riguroso y eficiente de las radiaciones”, afirmó el concejal Sebastián Chale, autor de un proyecto para modificar la legislación local sobre el tema.

En Rosario, en 2014 y 2015, empresas de telefonía se comprometieron  a una inversión en antenas, afirmando que para mejorar el servicio necesitaban instalar 60 nuevas. Sin embargo, sólo se tramitaron permisos para 20 aparatos, de los cuales sólo 4 fueron viables. Se estima que en Rosario hay cerca de 120 antenas para telefonía móvil.

Pero la instalación de antenas trae aparejado el riesgo de radiación, muchas veces denunciado por vecinos. Respecto a esto, Chale consideró: "Erróneamente se suele caer en el lugar común de buscar evitar la proliferación de antenas, cuando en realidad, a menos antenas, mayor es la radiación y viceversa. Si hay pocas antenas, estas requieren más potencia, es decir, deben irradiar más”.

De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Acceso y Uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación 2015 (ENTIC), hoy 8 de cada 10 argentinos usa celular, mientras que 7 de cada 10 utiliza computadora o internet.