El volante central de la Selección Argentina, Leandro Paredes, agotó su crédito en la Juventus de Italia: peleó con el director técnico, Massimiliano Allegri, luego de una práctica y pegó el portazo. También se lo pegaron a él. Por lo tanto, el campeón mundial deberá regresar al club que posee su pase, Paris Saint Germain, donde no tiene titularidad.

Parecía que el entrenamiento post Pascuas iba a ser una fiesta, con la apertura de la práctica al público, pero al acabar la sesión se desató la polémica cuando Paredes encaró a Allegri en el campo de juego, señaló La Gazzetta dello Sport.

Paredes, al que se lo notó nervioso durante el entrenamiento matutino, fue uno de los últimos en regresar al vestuario, con un ritmo acelerado y todo menos una sonrisa en el rostro.

Ya en el vestuario el ex futbolista de Boca Juniors evidenció toda su frustración y tuvo que ser calmado por varios de sus compañeros ante sus reclamos contra el DT.

Esta situación se dio antes de que Juventus juegue el jueves próximo como local ante Sporting Lisboa de Portugal en la Europa League, uno de los objetivos que tienen los italianos esta campaña.

La discusión motivó que Paredes se fuese del predio de entrenamiento sin almorzar con sus compañeros y su salida del equipo de Turín es casi segura ya que la Juventus no ejercerá la opción de compra de 20.000.000 de euros.

Muy distinto a lo que va a pasar con su compatriota y también campeón del Mundo Angel Di María, que está ganándose su continuidad en la Juventus, pese a sus 35 años.