¿Se animará Juan Manuel Llop a hacer debutar un juvenil en un clásico? Esa es la pregunta que este martes sobrevuela por el mundo Newell's ante la posibilidad concreta de que Joaquín Varela tenga su estreno en primera división el domingo ante Central en Arroyito. Es que ante la expulsión de Nehuén Paz ante Racing y la imposibilidad de utilizar a Franco Escobar, quien está prácticamente vendido a Atlanta United, el Chocho empezó a evaluar seriamente la chance de mandar a la cancha a Varela, un defensor de 19 años y 1,90 que estuvo en los dos últimos partidos en el banco y que apenas alcanza los 10 partidos en reserva.

Nacido en San Fernando del Valle de Catamarca el 25 de marzo de 1997, Varela llegó a Newell's en 2014 desde el Proyecto Crecer de San Francisco a través del convenio tripartito entre esa entidad, la Lepra y Bordeaux de Francia. Antes había hecho unas pruebas en San Lorenzo, pero como era muy joven y la distancia entre Catamarca y Buenos Aires era demasiada, le recomendaron que fuera al club cordobés para terminar de formarse. La vida en la pensión no fue sencilla y muchas veces intentó volverse con su familia, pero el amor por el fútbol y la determinación de ser un jugador profesional pudieron más. Incluso, en 2011 tuvo la chance de pasar un tiempo en el complejo de Bordeaux en Francia. 

Tres años más tarde, los captadores de Newell's lo vieron en el Proyecto Crecer y no dudaron en invitarlo a que entrene en Bella Vista junto con otros futbolistas de esas entidad, como Daniel Mancini, que llegó a debutar en primera y hoy juega en el fútbol francés. El 2017 lo encontró debutando en reserva. Hace pocas semanas firmó su primer contrato y Llop lo llevó al banco de suplentes frente a River y Racing. Y quizás termine el año debutando en primera justo en el clásico de la ciudad.