El Comité de Regularización de AFA anunció este miércoles que entre viernes y lunes se reunirá con Miguel Ángel Russo, para ofrecerle la sucesión de Gerardo Martino como entrenador del seleccionado argentino con el hándicap de saber que su respuesta "será positiva", a propósito justamente de su buena relación con varias figuras del poder político y deportivo nacional.

Después de desechar a Marcelo Bielsa, el candidato con mayor consenso dentro del mundo del fútbol, y en medio de una AFA hoy inexistente pero en vías de reconstrucción, que tampoco parece el ámbito de gestión apropiado para la idiosincracia del 'Loco', los cañones para ir a Rusia en 2018 apuntaron rápida y extrañamente a Russo.

Y esto último tiene que ver con lo anunciado este martes por Armando Pérez, titular del Comité de Reorganización que recién entrará en funciones mañana, cuando dijo que iba a consultar "a César Luis Menotti, Carlos Bilardo, Alfio Basile, Javier Mascherano y el propio Lionel Messi", pese a que el capitán está "renunciado" al seleccionado nacional, antes de elegir al sustituto del 'Tata'.

Pérez consultó a Claudio Tapia, el único dirigente que acompañó a la selección en los últimos tiempos y era el solitario punto de referencia que tenían y reconocían jugadores y cuerpo técnico durante la Copa América Centenario de los Estados Unidos. De ese encuentro surgió un "plan B" por si acaso se cayera lo de Russo, algo por estas horas difícil de que ocurra: el 'Chacho' Eduardo Coudet.

El técnico de 60 años, oriundo de Valentín Alsina, fue campeón local con Vélez en el Clausura 2005 y con Boca Juniors de la Libertadores 2007, mientras que con Rosario Central logró el ascenso a Primera en 2013 y cayó en la final de la Copa Argentina 2014 frente a Huracán. También dirigió a Racing Club, Estudiantes de La Plata y San Lorenzo, entre otros.