A fines del año pasado se realizó la convocatoria para el concurso y se recibieron 260 proyectos para cambiarle la imagen, por tercera vez, a los silos Davis, de Oroño y avenida de la Costa. Y este lunes, después de meses de espera, se anunció quiénes fueron los ganadores y cómo será la nueva imagen. 

El primer premio quedó en manos de Juan Esteban Maurino (Arquitecto, UNR) de 29 años, Ezequiel Alberto Dicristófaro (Técnico en Equipos e Instalaciones Electromecánicas), y Maite Pérez Pereyra (cursando Arquitectura en la UNR), ambos de 30 años. El objetivo de los autores fue, según sus palabras, resaltar del Castagnino Macro “su calidad de ser un espacio de encuentro cultural dentro de la ciudad y de expresión artística de la misma hacia afuera”.

A través de una paleta de doce colores, propusieron “una red cromática que unifica y enlaza todo el espacio”. Y en cada cilindro diseñado, buscaron referenciar a cada distrito de Rosario “sumado a su vez al concepto de la ciudad como parte de un sistema mucho mayor, que alcanza al país y a toda Latinoamérica con un color para cada uno de ellos”.

Por otro lado, hubo una mención honorífica para el proyecto de Víctor Cittá Giordano, quien trabajó a la par de sus hijos Vittorio (13 años) y Lorenzo (9). Misma suerte corrió el artista Bruno Crispino, con su proyecto “Como es arriba, es abajo”.