Los delincuentes más peligrosos de una cárcel en Tailandia pueden quedar en libertad si salen campeones del torneo de “Muay Thai”, incluso si aun no han terminado de cumplir la condena.

La competencia consta de cinco combates durante los cuales los competidores se deben ir eliminando hasta llegar a la final, en la que deben pelear contra un luchador profesional de Muay Thai. Esta es una disciplina de lucha libre típica de la cultura tailandesa, y es considerada una especie de religión por los propios ciudadanos del país asiático.

Para poder acceder al indulto, los reclusos de la prisión de Khao Prik (a unos 200 kilómetros de Bangkok) deben inscribirse en el programa “Prison fight”. La única condición para participar es que deben estar cumpliendo una condena de larga duración. Según su página web, el programa está orientado a "dar a los presos un objetivo, una esperanza".

La insólita competencia asiática es televisada, tiene sponsors y además hay mujeres encargadas de “animar” el parate entre combates. Pese a las críticas de algunas de las familias de las víctimas, desde que comenzó la competencia ya hay cinco campeones.