El ministerio de Seguridad, Maximiliano Pullaro, confirmó en rueda de prensa que no se harán cambios en la conducción política de seguridad ni en la cúpula del Servicio Penitenciario provincial luego del ataque que sufrió el convoy que trasladaba a los acusados del crimen de Claudio “Pájaro” Cantero.

Suele ocurrir que en episodios de trascendencia como el ocurrido este martes en el kilómetro 7 de la autopista  Rosario-Santa Fe, se desvincule a algún funcionario. Sin embargo, desde la Provincia consideran que el Servicio Penitenciario no tuvo responsabilidad en lo acontecido y que, por el contrario, respondió de manera exitosa a la tarea de resguardar a los detenidos y evitar una fuga.

Por eso Pullaro confirmó en el cargo al secretario de Asuntos Penitenciarios, Pablo Cococcini. “Es el mejor funcionario que tiene el Ministerio de Seguridad. No hace falta hacer historia pero recordemos qué sucedía años anteriores en el Servicio Penitenciario. Hoy el Servicio y la conducción es un ejemplo que asesora a otras provincias”, señaló.

La cúpula del Servicio Penitenciario quedó bajo las críticas en 2015 cuando trascendió que desde un teléfono fijo dentro del pabellón 7 de la cárcel de Piñero, Máximo Ariel "Guille" Cantero, y Emanuel Chamorro, líderes de la banda de los Monos, daban instrucciones a sus mujeres y laderos para que continúen moviendo las redes de la venta de drogas en la zona sur de la ciudad. También cuando varios miembros de la banda pasaron unas horas juntos en un mismo pabellón.