Hay algunas personas que tienen la curiosa condición de despertarse justo antes de que suene el despertador. Y parece que eso tiene una explicación orgánica llamada ritmos cicardianos. 

Son los ciclos que sigue el cuerpo y que duran aproximadamente 24 horas. Estos responden, principalmente, a la luz y la oscuridad en el ambiente y son por ellos que se rigen los animales, por ejemplo, que también se despiertan sin necesidad del despertador, claro está.

Sin embargo esto no le ocurre a todas las personas, sino que es más frecuente en aquellas que llevan un modo de vida meticuloso y rutinario: se despiertan, comen y se acuestan siempre a la misma hora, ya sea día laborable, festivo o estén de vacaciones.

La excepxión a esta regla, o a esta rítmica, tiene que ver con un estado de alerta que crean ciertas hormonas y sin ciclo alguno también generan que las personas se despierten justo antes de lo debido. Esto es habitual cuando se debe enfrentar una actividad que requiere de levantarse ese día a determinada hora.