La Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU dio el visto bueno para que Argentina incorpore 1.633 kilómetros cuadrados a su plataforma continental. El espacio marítimo en cuestión se ubica entre los 39 y los 42 grados Latitud Sur, debajo del límite con Uruguay demarcado en las aguas del Río de la Plata.

"Cuando se tiene un Norte claro que trasciende las distintas administraciones se logran estos resultados", celebró la canciller Susana Malcorra durante una conferencia de prensa realizada en el Palacio San Martín.

El año pasado, cuando Argentina logró un importante reconocimiento de sus planteos en las Naciones Unidas (ONU), este punto había quedado pendiente de resolución, ya que la Comisión de Límites de la Plataforma Continental le recomendó reducir sus pretensiones. Pero aportes de material extra sirvieron para sostener que la franja de subsuelo marítimo que reclamaba el país era una prolongación natural de su territorio. 

Para poder convencer a la ONU la cancillería recurrió a expertos en Batimetría (técnica de medición de las profundidades acuáticas), Sismología, Geología, Geodesía, Geofísica y Cartografía, entre otras especialidades, que sostuvieron su postura. Para la presentación argentina colaboraron diferentes ministerios y hasta la empresa estatal YPF, que aportó técnicos y estudios respaldatorios.

"Finalmente el reclamo de Argentina fue aceptado en un 100%, es decir que el país logró incorporar 1.633 kilómetros cuadrados de plataforma marítima por arriba del planteo previo que se había efectuado en 2009. Ahora deberemos incorporar estos cambios a los mapas y cartas náuticas", explicó Frida Armas Pfirter, coordinadora de la Comisión Nacional del Límite Exterior de la Plataforma Continental (Copla).

Se trata de un territorio marítimo más allá de la zona económica exclusiva de las 200 millas marítimas. En la plataforma continental (a diferencia de la zona económica exclusiva) se permite la pesca internacional, pero el país tiene todos los derechos sobre las riquezas del suelo y del subsuelo.

"Es una zona de mucho espesor de sedimentos, que posiblemente posea hidrocarburos y gas metano, pero está todo por descubrir", indicó la coordinadora de Copla.