La industria de tratamiento de residuos, aceites industriales y petróleos crudos para crear combustible Bravo Energy cerró sus puertas este viernes sin previo aviso y dejó a sus 35 trabajadores en la calle.

“Cuando llegaron a las seis de la mañana los empleados se encontraron con el portón cerrado con candado, y la sorpresa de que había cerrado”, precisó el delegado del Sindicato de Petroleros Privados de San Lorenzo Rubén Pérez en diálogo con Rosarioplus.com.

Si bien no habían sido notificados del cierre, el último tiempo los empleados asistían sin hacer tareas, debido a que “había bajado la actividad y no había materias primas”, apuntó el dirigente.

El sindicato realizó una denuncia ante el Ministerio de Trabajo, y un inspector verificó la situación. Hay una reunión organizada para el próximo martes al mediodía, convocada por el propio ministro Julio Genesini.

La industria, de capitales estadounidenses y de un empresario de Pilar, Buenos Aires, envió telegramas de despidos y suspensiones por 30 días sin goce de sueldo, que “recién durante este viernes fueron llegando a los domicilios de los 35 empleados”, especificó Pérez.