Luis Contigiani pasó de ser asesor en Federación Agraria a ser el ministro de la Producción de Santa Fe, cargo que asumió en diciembre de 2015. Un año y medio después, y tras ser de los mayores críticos del macrismo, se prepara para enfrentar su primera candidatura para ocupar una banca como legislador nacional. Mano a mano con Rosarioplus.com trazó el panorama del país, de lo que pretende si llega a ser diputado y del ánimo de la gente.

¿Cómo se perfilan las Paso a dos semanas de realizarse?

Va a ser una buena oportunidad para saber dónde estamos parados. Es una buena encuesta para todos. La gente está algo interesada pero todavía con una distancia en cuanto a conocimiento e involucramiento, sobre todo en candidatos. Hay que llegar con más información en lo que resta para entusiasmar más y canalizar el interés.

¿Dónde se posiciona Santa Fe en esta polarización con el gobierno nacional?

Santa Fe tiene un presente para mostrar. Presente en educación, en salud, en obras públicas con un programa de 20 mil millones de pesos con ejecución del 25% generando impacto en el empleo. Hemos estado en todos los conflictos laborales en Santa Fe defendiendo los puestos laborales. Mientras el gobierno nacional trata de correrse del ángulo y no intervenir bajo una mirada privatista, Santa Fe tiene la decisión política de que la economía reaccione y no dejamos que el mercado resuelva los problemas solo y a su manera. El gobierno nacional no tiene presente, es pobre y débil, por eso hablan del pasado.

¿Dónde van a buscar votos que no sean del socialismo puro?  

Necesitamos construir una nueva mayoría con base social, democrática y progresista, y convocar a todos los que están en este campo. En esa nueva mayoría hay que convocar al peronismo progresista y social, al radicalismo aunque la mayoría del radicalismo en Santa Fe está en el Frente Progresista, al desarrollismo progresista, a los independientes, organizaciones sociales.   

El gobierno empieza a hablar de una leve recuperación en datos macroeconómicos pero aún no se siente en los bolsillos de las personas

Me hace acordar a los ’90 cuando hablaban de la macro y que todo estaba muy bien, con Argentina insertada en el mundo, sin déficit. ¿Qué pasaba abajo?, se des industrializaba el país, se perdía empleo. En el escenario más optimista que recuperáramos lo que se perdió en 2016, nos colocaríamos a nivel de actividad económica de diciembre de 2015. Esto habla de la brutal caída de la economía en 2016. Los números que tiran son recuperaciones neutras.

¿Qué ideas pretende llevar en caso de ingresar al Congreso, sobre todo cuando se habla de iniciativas para flexibilizar el trabajo?

Pretendo ser coherente, y quiero que mi agenda del Ministerio sea una continuidad en el Congreso. En términos de intención es la misma. Si hay flexibilización me tendrá como opositor de ese tipo de iniciativas, pero también tener una propuesta superadora que no implique flexibilizar o precarizar el trabajo. El error está en reinstalar la teoría del derrame: asegurarle ganancias a un sector del capital vía reducción de costos laborales presumiendo que esa ganancias va a ir al capital productivo pero la historia marca que va a la fuga de capitales.