Uno de cada cinco australianos fue alguna vez víctima de "venganza porno" o "pornovenganza", como se llama a la difusión en la web de imágenes sexuales de carácter privado sin el consentimiento de alguno de los fotografiados, según una investigación divulgada este lunes.

El trabajo de las universidades de Monash y de RMIT , realizado en base a más de 4.200 entrevistas, mostró que son especialmente vulnerables los grupos marginales, principalmente los discapacitados (56%) y los aborígenes australianos (50%).

Asimismo, el peligro mayor recae más en los jóvenes y los miembros de la comunidad LGBT (36%) que entre los heterosexuales (21%), mientras que no se detectó una diferencia por cuestión de sexo, según un comunicado de los autores del análisis difundido por EFE.

El 80% de las víctimas sufrió altos niveles de angustia psicológica, como depresión y trastornos de ansiedad, y el 46% de estos temió por su seguridad. Respecto del victimario, en el 54% de los casos se trató de hombres, en el 32% fueron mujeres y en el resto el encuestado desconocía al culpable o era un grupo.

La investigación reveló que la venganza porno es más común y afecta a más gente de los que se presumía en un principio, por lo que el problema va por delante de la legislación, afirmó la directora del estudio, Nicola Henry, de la Universidad RMIT.

"Esto no se trata solo de pornovenganza, las imágenes se están utilizando para controlar, abusar y humillar a la gente de una manera que va mucho más allá del escenario de una ruptura sentimental", indicó Henry. El estudio propone cambios sociales, legislaciones e iniciativas como la línea abierta en Reino Unido en 2015 para atender a las víctimas del fenómeno. 

En Argentina, un proyecto de ley que cuenta con media sanción en el Senado busca criminalizar esta práctica y propone establecer la misma pena que para el delito de grooming o ciberacoso, que van de seis meses a cuatro años de cárcel.

El proyecto presentado por la senadora por San Juan Marina Riofrío, presidenta de la comisión Banca de la Mujer del Senado, fue aprobado en noviembre pasado en la Cámara Alta y espera su tratamiento en Diputados para convertirse en ley.

La iniciativa busca incorporar al Código Penal el Artículo 155 Bis, para penalizar la "pornografía de venganza" a fin sancionar "estos actos delictivos que exceden el alcance de las normativas vigentes en nuestro país, demandando una normativa específica para su penalización".

(Telam)