El Ejecutivo municipal insiste con su idea de tomar deuda en moneda extranjera. El proyecto, que ya obtuvo el ok en la comisión de Presupuesto en el Concejo, se empantanó en Gobierno ante la negativa de varios sectores de la oposición, quienes desconfían de que el municipio se endeude en dólares y bajo la órbita de tribunales de la ciudad de Nueva York. En ese sentido, desde el socialismo salieron a responder con una suerte de certificado de buena conducta crediticia: un crédito por 65 millones de dólares que, en el año 1998 con Hermes Binner como intendente y Ángel Sciara en la Secretaría de Hacienda, la ciudad tomó a 20 años con organismos multilaterales y que en el primer trimestre de 2018 terminará de pagar. 

“Las obras se ejecutaron y la ciudad lo está terminando de pagar”, afirmó a Rosarioplus.com Verónica Irizar, actual concejala y ex secretaria de Hacienda de la gestión Fein. Así, desde el oficialismo argumentan que “ni en las peores crisis” hubo inconvenientes para cumplir con las cuotas y recuerdan que las actuales dudas de la oposición son las mismas que existían hace casi dos décadas.

Aquel financiamiento, recuerda Irízar, “nos permitió avanzar en obras significativas para la ciudad como la construcción de cuatro de los seis distritos, que colaboraron en la descentralización”. También Rosario se sirvió de ese crédito para accesos viales internos (Pellegrini, Oroño, Seguí y Avellaneda), abrir calle Sorrento hasta Circunvalación, levantar el Cemar y la última etapa del nuevo Heca, entre otras cosas.

La presidenta de la comisión de Presupuesto del Concejo recordó que en 1998, antes de que se aprobara el endeudamiento, “las dudas de la oposición eran las mismas que las actuales”. “En su momento –amplió Irizar- surgieron los mismos cuestionamientos por tratarse de un crédito en moneda extranjera, pero aunque desde el 2000 hasta acá tuvimos de todo, en ningún momento hubo dificultad para pagar la cuota”.

Aquel crédito perdido

El socialismo se encuentra ahora ante la posibilidad de sacarse una vieja espina. Es que en el año 2012, apenas Mónica Fein asumió la intendencia, Rosario contaba con un crédito aprobado por el Banco Mundial que finalmente no pudo aprovechar, ya que el gobierno nacional de aquel entonces no firmó el financiamiento.

La intendenta, imposibilitada de hacerse de 20 millones de dólares, fue en ese momento muy crítica de Nación. Dijo que “39 mil familias perdieron la posibilidad de tener conexiones cloacales”.

Tire y afloje

El PS encontró en el bloque Ciudad Futura a un aliado que hace cinco meses era impensado. El oficialismo aceptó sumar al proyecto original algunas modificaciones presentadas por los concejales Monteverde, Salinas y Tepp, pero la carrera por conseguir más apoyo continúa.

La iniciativa para tomar deuda sorteó la comisión de Presupuesto pero se trabó en Gobierno, donde la oposición es mayoría. Allí el principal obstáculo para el proyecto del Ejecutivo son los concejales del PRO y Jorge Boasso.

En tanto, el peronismo también se mantiene firme en no acompañar. Eduardo Toniolli remarcó que “impugnamos este mecanismo de endeudamiento en un país que está en crisis y con muchas presiones hacia la devaluación”.