El Concejo aprobó, este jueves, una ordenanza que establece fuertes multas y la posibilidad de clausurar a aquellos comercios que vendan medicamentos y no estén habilitados para ese fin. Los montos arrancan en los 200 pesos y ascienden hasta más de 6000 pesos.

El proyecto, una iniciativa de la concejala socialista Verónica Irízar, establece duras sanciones sobre comercios como kioscos, supermercados, almacenes y minimarkets que vendan medicamentos, como los analgésicos, antiácidos y digestivos, algo que está prohibido por ley nacional desde 2009. Si bien el Concejo ya había aprobado la adhesión, en esta oportunidad se dispuso que se proceda “incluso a la clausura provisoria por 90 días de aquellos locales que cometan infracciones reiteradas”.

“El expendio de medicamentos y sustancias farmacológicas en comercios que no estén habilitados como Farmacia, por la Dirección de Inspección de Farmacias de la provincia, o la autoridad que en el futuro la reemplace, se penará con multa de 100 Unidades Fija (UF) a 300 UF y/o clausura de hasta 90 días”.

Cada Unidad Fija es el equivalente al precio del momento de un litro de nafta especial. Es decir que si se toma el litro de Premium de YPF a 20,59 pesos, el máximo de una multa es actualmente 6.177 pesos.