Este martes se conocerá el veredicto por el crimen de Claudia Schaefer, asesinada por su esposo Fernando Farré el 21 de agosto de 2015 quien es acusado por femicidio. Será un jurado de 12 personas quien defina si tiene una condena a perpetua para lo cual requiere unanimidad, si fue emoción violenta o si deberá recuperarse en un neuropsiquiátrico. 

El lunes las fiscales que intervienen en el juicio por el crimen de Claudia Schaefer, asesinada por su esposo Fernando Farré el 21 de agosto de 2015, pidieron al jurado durante sus alegatos que lo declaren culpable y se le aplique la pena de prisión perpetua por el femicidio. 

"Durante el juicio se probó que la relación se daba en el marco de violencia de género, donde había violencia física, psicológica, verbal y económica", aseguró la fiscal Carolina Carballido Calatayud. "Fue un femicidio de manual y a sangre fría", agregó.

Por su parte, el abogado que representa a la familia de Claudia Schaefer pidió al jurado que declare al acusado culpable de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por femicidio, al considerar que mató a su mujer "como a un animal" y "por placer" y que actuó "como tenía previsto". Farré la degolló y mató de 74 puñaladas a su ex mujer en su casa de un country Martindale de Pilar. 

La defensa mantuvo la estrategia de pedir la inimputabilidad del acusado con el argumento de que estaba psicológicamente "enfermo" al momento del crimen, o que atenuaran la condena por haberse tratado de un acto en estado de "emoción violenta".

Las palabras del acusado

Luego, Farré leyó una carta que les escribió a sus tres hijos el año pasado en la que afirmó que no puede "explicar ni justificar lo que pasó" y expresó: "Perdón, los quiero como siempre y más". El acusado hizo uso de su derecho a pronunciar las últimas palabras del proceso al finalizar los alegatos de las partes ante el jurado y el juez del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de San Isidro, Esteban Andrejín.

"Las primeras palabras que se me ocurren en este momento son que Dios los bendiga, Shalom y que la paz esté con nosotros", comenzó Farré, sentado en el banquillo frente al jurado y vestido de traje gris y camisa blanca.

"El 21 de agosto del año pasado cambiaron nuestras vidas", empezó, e inmediatamente se le quebró la voz y comenzó a sollozar antes de continuar: "Están con gente que los quiere y los apoya, pero cuando quieran me pueden venir a visitar o llamarme por teléfono".