La problemática sobre la recolección de residuos en la ciudad llegó a convertirse en la polémica del verano pasado, a tal punto que la intendenta Mónica Fein, alertada por un gran número de reclamos por la basura acumulada, reconoció la falencia y se comprometió a subsanar el servicio mediante la compra de nuevos camiones recolectores. Siete meses después, se incorporaron seis nuevos camiones al servicio de la empresa Sumar.

Si bien el reclamo más grande se escuchó de parte de los vecinos durante el verano debido a los olores nauseabundos generados por la acumulación de basura en la ciudad, el Sindicato de Recolectores de Santa Fe se quitó el lazo de encima y se acopló a las denuncias para apuntar directamente al municipio, a quien responsabilizó por la falta de camiones recolectores y de no tomar medidas urgentes.

Rápido de reflejos, el secretario el secretario general del municipio, Pablo Javkin, estimó a mediados de enero que en 60 días estaría regularizada la situación tras solucionar el recambio de camiones. Si bien la problemática fue mejorando a medida que el calor sofocante fue mermando y se afinaron las tareas de recolección, los camiones tardaron unos meses más en salir a la calle.    

Este lunes fue la presentación de las nuevas unidades de recolección. La empresa Sumar tendrá seis nuevos 0km, tras una inversión de 29 millones de pesos. Además, se incorporaron 200 nuevos contenedores.

"Tenemos dos empresas privadas y la empresa pública Sumar, que se había quedado con camiones muy antiguos, por lo que compramos seis camiones 0km", precisó la intendenta Mónica Fein y agregó que "todo el macrocentro, grandes avenidas y Fonavis están abarcados por esta empresa".