El gobernador Miguel Lifschitz aseguró que el llamado del presidente Mauricio Macri a generar "consensos básicos" a través del diálogo, como anunció este lunes al presentar un plan de reformas estructurales, y la deuda histórica que mantiene la Nación con la provincia por coparticipación "corren por caminos separados o paralelos".

El mandatario santafesino dejó en claro su predisposición a participar de la mesa de diálogo, que fue convocada en el CCK, pero remarcó que la deuda que Nación mantiene con Santa Fe "no es un tema que esté en discusión" porque "el fallo de la Corte es inapelable".

"El fallo es inapelable. Sólo falta buscar una forma de cerrar un acuerdo”, analizó Lifschitz, al tiempo que aclaró que si bien la provincia volvió a presentar el caso ante el máximo tribunal, lo hizo “sin agotar las negociaciones”. Vale recordar que la Provincia volvió a acudir a la Corte Suprema para que se garantice el pago dispuesto por el máximo tribunal en 2015.

En cuanto al diálogo convocado este lunes por el jefe de Estado, valoró que “hay un primer aspecto positivo, bastante inédito en la Argentina de los últimos años y es que un presidente convoque a todos los sectores de la sociedad civil y de los distintos poderes del Estado para discutir una agenda”.

En declaraciones efectuadas a Radio Universidad de Santa Fe, el mandatario provincial consideró que es necesario dar el “debate sobre los temas concretos, sobre las propuestas más finas, la letra chica de cada una de las iniciativas del gobierno”. “A la hora del diagnóstico, los temas que estuvieron arriba de la mesa son de los más importantes de la Argentina. Ojalá podamos tener un debate serio y participativo”, concluyó.