En diciembre pasado la Cámara Federal de Rosario anunció la reapertura de la causa por el vaciamiento y privatización del ex Banco Provincial de Santa Fe, anulando así la resolución del ex juez Víctor Brusa (actualmente juzgado por delitos de lesa humanidad), quien en junio de 1993 había ordenado el sobreseimiento provisional de los 44 directivos implicados. Y en consecuencia, ahora el gobernador Miguel Lifschitz anunció la desclasificación de los documentos y archivos pertenecientes al informe de la Comisión Investigadora que estudio el tema en 1997 (Comisión Nogueras) e instruyó al fiscal de Estado Pablo Saccone para que constituya como querellante al Gobierno de Santa Fe.

"Este banco era la joya de la provincia, un patrimonio simbólico, histórico y cultural, era parte de la historia del desarrollo y la integración de la provincia que soñaron esos grandes gobernadores que lo crearon (en 1874) y lo hicieron crecer hasta convertirlo en uno de los más importantes de la Argentina", destacó Lifschitz durante el anuncio que realizó el martes en la Casa Gris.

El gobernador, que dio luz verde para dar a conocer todos los detalles del presunto crimen económico, sentenció: “Pocos ejemplos hay de un escándalo de semejante magnitud, de un quebranto de tanto impacto sobre una institución financiera sólida y prestigiosa, y de una venta tan absurda por la que tuvimos que pagar 1.000 millones de pesos/dólares para que un grupo privado de dudosos antecedentes se quedara con esa joya del patrimonio santafesino".

Además, anticipó que va a poner a disposición de los ciudadanos toda la documentación que la comisión investigadora que dirigía el diputado Alfredo Pichón Nogueras (dirigente del Partido Demócrata Cristiano, fallecido en 2002) pudo reunir en pocos meses de trabajo, con la colaboración de mucha gente, "y que si la Justicia la hubiera tomado en ese momento, probablemente hoy tendríamos muchas condenas efectivas".

La historia

El supuesto crimen económico llevado adelante por directivos que nunca se sometieron a indagatoria, habría culminado con un quebranto de entre US$ 500 millones y US$ 1000 millones en perjuicio de la entidad estatal de crédito. La investigación por el vaciamiento del banco, previo a su venta, comenzó hace más de 25 años y quedó en pausa hasta diciembre pasado, cuando la Cámara falló que no existe “ningún obstáculo procesal para continuar”.

La venta se concretó entre 1996 y 1998 por 58 millones de pesos. Quienes se hicieron acreedores del banco fueron los hermanos Rohm, vinculados estrechamente con el por entonces presidente de la Nación Carlos Menem, según hicieron saber crónicas de la época. Pero el vaciamiento de la entidad había comenzado hace mucho tiempo, en 1979, según pudo saber la comisión Nogueras.

José y Carlos Rohm fueron los creadores del Banco General de Negocios (BGN) y participaron de importantes privatizaciones durante los ’90. YPF, Somisa, Banco Hipotecario y, claro, el Banco Provincial de Santa Fe, son algunos ejemplos.

El escándalo salpica a varios funcionarios de aquella época, por ejemplo, al ex gobernador y actual senador por Cambiemos, Carlos Reutemann. En el año 2009, cuando se desempeñaba como ministro de Gobierno de Santa Fe, Antonio Bonfatti acusó al Lole de mentir “cuando dice que no conoce a los hermanos Rohm”.

Bonfatti aseveró por entonces, en una entrevista al diario Rosario 12, que cuenta con "documentos" que prueban las gestiones que hizo Reutemann para privatizar el Banco de Santa Fe antes de que Jorge Obeid se lo entregara a los Rohm a bajo precio.