El presidente Mauricio Macri visitó en forma sorpresiva a una emprendedora de Rosario que le había escrito una carta contándole su proyecto, donde compartiendo unos mates y facturas. Tras encabezar el acto oficial por el Día de la Bandera, Macri se trasladó junto a parte de su equipo hasta el galpón ubicado en 24 de Septiembre al 3500 de Rosario, donde Elisa y su marido Jorge desarrollan su emprendimiento productivo.

 “Yo le escribí una carta contándole mi historia, y no pensé que se iba a armar tanto revuelo”, dijo Elisa de 59 años, propietaria junto a su marido de un servicio de encomiendas puerta a puerta entre Rosario y Santa Fe. Mientras lamentaba no haberles avisado a sus nietos que los visitaría el presidente, Elisa dijo que habló con Macri de “la familia, de fútbol y de cómo va el país”.

Elisa contó que escribió la carta al presidente una noche de insomnio, a la 1.45 de la madrugada. Allí la mujer le explica que “es algo nuevo para nosotros pero nos gustan los desafíos y ver que se puede. Con ganas de trabajar se puede, y no somos unos pibes”. “Es la primera vez que estoy con un presidente de la Nación, es muy emocionante”, dijo.

Sobre la charla con Macri, acompañada con mates y facturas, Elisa dijo que le contó “de la inseguridad que se está viviendo, este flagelo tan grande que tenemos”. “Debemos reconocer que está duro el país, que falta todavía”, pero que “hacen falta emprendedores, porque a la gente si le va mal en una actividad que le busque la vuelta por otros caminos alternativos”, añadió.

Aclaró que si bien necesita sumar un nuevo vehículo a la empresa familiar, “no es nuestro propósito recibir una ayuda, simplemente contarle nuestro proyecto y nuestra historia”. Finalmente, y aún “emocionada” por la imprevista visita presidencial –le habían dicho que iba a ir alguien de su equipo- Elisa dejó un mensaje de esperanza: “Poniendo ganas y voluntad en cada cosa que uno emprenda va a salir, este país lo sacamos entre todos y trabajando”.