Vuelve a iniciarse el debate en torno a los cuidacoches. La semana pasada, dos menores de edad que desempañaban la actividad en inmediaciones de Montevideo y Mitre fueron baleados en las piernas, mientras que horas más tarde otro ingresó al Hospital de Emergencias con varias heridas tras una riña protagonizada en Moreno y San Luis. En el Concejo Municipal descansan algunas propuestas para regularlos y otras que plantean la prohibición en zonas críticas.

El bloque de Unión PRO en el Palacio Vasallo, protesta desde hace años en busca de una solución. Primero fue el hoy diputado provincial Roy López Molina quien propuso la prohibición de los denominados “trapitos” en ciertos sectores de la ciudad y quien recogió la posta es el edil Gabriel Chumpitaz, electo el año pasado.

Para el experto en seguridad “la única salida al tema cuidacoches es prohibirlos en las zonas críticas". Chumpitaz reclamó que “el Concejo apruebe una ordenanza que prohíba esta actividad en las áreas de estacionamiento medido, zonas de esparcimiento nocturno y espectáculos deportivos y musicales masivos, donde se organizan verdaderas mafias".

Pero no es la única opción. En enero pasado, la concejala Carola Nin (Compromiso con Rosario), presentó un proyecto de decreto que apunta a resolver la problemática. Ni prohibición ni mirar para otro lado. La edila propuso censar a los cuidacoches para luego brindar una capacitación en oficios, en el caso de que sean mayores de edad, o se los acompañe en su proceso de reinserción escolar, si son menores.

Otra alternativa es la planteada por los concejales de Ciudad Futura. La idea del bloque, presentada en marzo, consiste en incluir a los “trapitos” en el sistema de estacionamiento medido. Los cuidacoches tendrían a su cargo la venta de las tarjetas de estacionamiento, brindando el servicio de cuidado de automóvil a quien estacione en el microcentro.

Como sea, parece que ahora sí llegó el momento de debatir al respecto en el Concejo Municipal. La Fiscalía Regional ya avisó sobre su preocupación por los hechos de violencia que parecen multiplicarse y suscitarse con cada vez más frecuencia. De hecho, las cifras oficiales indican que en los últimos dos meses hubo cinco episodios graves protagonizados por cuidacoches.