El fiscal Walter Jurado imputó este jueves a Lisandro A., el conductor del otro vehículo que participó de una picada que terminó en tragedia el 30 de julio a la madrugada, en 27 de Febrero y Necochea, por haber poner en riesgo la integridad física del prójimo. Sin embargo, no lo inhabilitaron para conducir, a pesar de la expectativa de los familiares de Andrés Muñoz, la víctima fatal de aquel choque.

En la audiencia se le imputó la figura de prueba de velocidad ilegal, de acuerdo con el artículo 193 bis, un delito que tiene una pena prevista de entre seis meses y seis años de prisión. Cabe señalar que el mismo día del accidente fatal se le había formado una causa por Homicidio Culposo.

El fiscal solicitó alternativas a la prisión preventiva y pedirá que el imputado cumpla ciertas reglas de conducta, la prohibición de salir del país y que comparezca de manera obligatoria y semanal ante la Oficina de Gestión Judicial.

Jurado explicó: “Junto con la defensa acordamos algunas medidas alternativas (…) pero no acordamos respecto de la inhabilitación. Nosotros la solicitamos, la defensa se opuso y el juez hizo lugar a lo solicitado por la defensa, es decir rechazó el pedido de inhabilitación”.

Según explicó el fiscal, la decisión del juez se basó en una cuestión técnica legislativa ya que la inhabilitación que fija la ley procesal es para delitos de lesiones y homicidios culposos, no así para las picadas.

Lisandro A. venía conduciendo un Chevrolet Vectra a alta velocidad, aparentemente compitiendo en una picada ilegal contra Ariel L., quien guiaba el Renault Laguna que finalmente impactó contra el Fiat Duna que conducía Andrés Alejandro Muñoz, de 35 años, quien murió por el fuerte impacto.