Trabajadores de distintos efectores de salud de la ciudad continúan con los reclamos por los problemas edilicios que se multiplican y dificultan la atención. El déficit de infraestructura y la tardanza en la restauración han generado la necesidad de los trabajadores de hacerse oír.

Un caso es el del Hospital Roque Sáenz Peña, donde algunos delegados convocaron a un abrazo solidario en defensa del edificio y de la Salud Pública para este martes a las 10, en la puerta principal de calle Laprida 5381.

En un comunicado que giraron a los medios de comunicación, los trabajadores detallan como ejemplos de la problemática: “Consultorios extremadamente reducidos, sala de espera donde los pacientes se apiñan a la espera de ser atendidos; deterioro grave y mala calidad de los sanitarios y vestuarios”.

“Los trabajadores no sólo no queremos ser cómplices del actual mal funcionamiento del hospital Roque Sáenz Peña, sino que somos los más interesados en defender la salud de nuestro pueblo y a nuestro hospital”, dice el comunicado.

Otro inconveniente que complica la atención es el proceso de restauración de la sala maternal, lo que genera la derivación de las embarazadas a la Maternidad Martin, dejando en el Saenz Peña sólo un partero para emergencias. “No han dejado neonatólogos en el hospital, sólo un partero. Esto no corresponde porque no hay profesionales que acompañen durante el embarazo”, explicó a Rosarioplus.com Eduardo Taboada,  el titular de Amra, entidad que nuclea a los profesionales de la salud.

En el Hospital Carrasco, de Avellaneda al 1400, el servicio de gas quedó cortado en octubre después de que inspectores detectaran una pérdida en una red subterránea próxima a la guardia. Según comentaron de Amra la reparación se está ejecutando pero la tardanza se debe a que son muchas las obras requeridas. También hubo problemas en el funcionamiento de los aires acondicionados durante el verano.

El Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) estuvo a punto de derivar al Carrasco la guardia de consultas no urgentes y dedicarse de lleno a las urgencias. Sin embargo, la secretaría de Salud municipal decidió dar marcha atrás con la decisión y quedó todo como estaba. “Hablamos con las autoridades para que no levanten la sala de consultas, porque hubiese sido un problema de organización derivar toda esa sala al Carrasco”, explicó Taboada en Sí 98.9.