Ajustes por inflación e incógnita por el bono: las claves del aumento a jubilados
El gobierno nacional avanza en la modificación del cálculo para el aumento jubilatorio y experimenta con una solución transitoria hasta llegar a julio. La letra chica del Decreto referido al tema generó polémica ya que los aumentos por inflación no empezarán regularmente en abril (como se había anticipado oficialmente) sino en julio, cuando vence la fórmula vigente. Hasta entonces, en abril, mayo y el mes siguiente se van a dar adelantos a cuenta del aumento de junio, que estará determinado por la fórmula vigente.
Para pasar en limpio respecto a lo inmediato, en abril se va a otorgar un aumento del 13,2%, correspondiente a la inflación de febrero, mientras que desde el gobierno dispusieron un extra del 12,5% para compensar parte de la inflación acumulada. De esta manera la mínima pasará de $ 134.445 en marzo a $ 172.400 en abril. Por el momento es una incógnita si este sector cobrará el bono de $70.000, o apenas una parte.
Pérdida asegurada
Más allá de los detalles en la aplicación, lo concreto es que la modificación provisoria no va a evitar que los jubilados pierdan de manera brutal contra la inflación acumulada desde diciembre, post devaluación. Se calcula que desde ese momento hasta marzo, las jubilaciones se van a actualizar en un porcentaje cercano al 50%, mientras que la inflación llegará (según pronósticos) al 90%.
Otro dato a tener en cuenta es que la inflación de diciembre (25,5%) y enero (20,6%) no será tenida en cuenta en ningún cálculo. Esto profundizará la crisis de jubilaciones, entre febrero de 2016 y de 2019 registraron una perdida del 16% en el poder adquisitivo, mientras que entre febrero 2023 y febrero 2024 con bono perdieron un 29% de poder adquisitivo, con fuerte caída particularmente desde la asunción de Milei.
La pérdida no llama la atención si se tiene en cuenta que este sector fue el que sufrió la mayor parte del ajuste durante el primer bimestre de este año, y fue el que posibilitó el mayor ahorro para cumplir con el objetivo fiscal que obsesiona al presidente Javier Milei. Distintas consultoras privadas coinciden en que los beneficiarios del sistema previsional sufrieron el peor ajuste entre los sectores que componen el gasto público, dejando atrás el recorte en obra pública y las transferencias a provincias.
Nueva fórmula, muchos asteriscos
Según el Decreto de Necesidad y Urgencia 274, las jubilaciones empezarán a actualizarse por inflación, de manera mensual, pero teniendo en cuenta el último dato que informe el Indec. Es decir, se va a actualizar con una inflación de hace dos meses.
La aplicación de la nueva fórmula no va a ser inmediata. En junio se aplicará la fórmula vigente desde 2021, pero para evitar una pérdida más brutal que la que ya se está dando, mientras tanto se van a otorgar aumentos mensuales atados a la inflación de hace dos meses.
Por el momento es un interrogante qué sucederá con el bono adicional de $70.000 que se venía pagando, ya que rige un Decreto (desfasado a esta altura) que establece que lo percibirán quienes cobren hasta $134.000, con el objetivo de que lleguen a un tope de $204.000. Pero a partir del mes que viene, con el aumento, quienes perciben el básico pasarían a quedar cerca de los $172.000. Con lo cual, si se mantiene el mismo tope, cobrarían un bono de apenas $32.000.
Aumentos hasta julio
-En abril habrá un aumento del 13,2% (correspondiente a la inflación de febrero) + un 12,5% a modo de compensación. Por ahora se mantiene la incógnita sobre el bono de $70.000
-En mayo se aumenta por inflación de marzo. Misma situación de incógnita respecto al bono.
-En junio se genera el empalme. Lo que dispone el Decreto es, comparar el porcentaje de aumento entre la ley vigente y el acumulado de inflación que se tomó en abril, mayo y junio.
Si el índice de la fórmula prevista en la Ley vigente desde 2021 arroja para junio un resultado mayor a lo otorgado en concepto de anticipos, se pagará solo lo que haga falta para completar el porcentaje de la movilidad definido por ese cálculo.
En caso de que la fórmula resulte menor al del reajuste acumulado por inflación dado en abril, mayo y junio, entonces no se descontará la diferencia.
Pérdida acumulada
En diálogo con Rosaioplus.com, la integrante del Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía (Mate), Natalia Pérez Barreda, analizó la evolución de los haberes en los últimos años y expuso las pérdidas sufridas desde 2016 a la actualidad.
Respecto a la implementación de la nueva fórmula, sostuvo que “el problema es que no se compensa la inflación de diciembre y de enero” y agregó que al tomar como referencia a partir de la inflación de febrero, se está pasando por alto el pico inflacionario más alto.
Por último, señaló: “Entre febrero de 2016 y de 2019 se dio una perdida del 16% en el poder adquisitivo, mientras que entre febrero 2023 y febrero 2024 con bono se perdió un 29% de poder adquisitivo”, con fuerte caída desde la asunción de Milei.