El gobierno provincial tiene intenciones de aumentar el Impuesto Inmobiliario Urbano y Rural a partir de 2017. Así lo anunció el ministro de Economía, Gonzalo Saglione, en un proyecto para implementar el incremento, donde además se contempla una reducción en las obligaciones de pequeños comerciantes y sectores de la industria provincial.

El gobernador Miguel Lifschitz también participó del anuncio en el Salón Blanco de la Casa Gris, donde se expusieron los lineamientos para que la Legislatura apruebe una suba de entre el 25 (75% del total) y el 32 por ciento para el gravamen sobre bienes inmuebles. En la presentación del Presupuesto 2017, el gobernador había admitido que la suba del Inmobiliario sería para corregir “distorsiones” producidas por la inflación.

También aclararon que la alícuota de Ingresos Brutos bajará hasta el 3,3% para firmas que facturen entre 1 y 4 millones de pesos por año. A su vez, descenderán del 0,25 al 0,2 por ciento en el caso de los acopiadores de cereales que generen menos de 200 millones de pesos por temporada.

“El impuesto sobre el que se hacen las modificaciones más significativas, que es el impuesto sobre los Ingresos Brutos, es el principal componente del sistema tributario provincial y provee más del 70 % de nuestros recursos. En ese impuesto, Santa Fe tiene aproximadamente 150.000 empresas que lo tributan y más de 100.000 serán beneficiadas con algunos de los cambios que proponemos”, apuntó Saglione.