La Unión Europea quiere aplicar un impuesto a las multinacionales del 15%
La Unión Europea (UE) presentó este miércoles una iniciativa para aplicar un impuesto de un mínimo del 15% para las grandes empresas, en línea con lo acordado en octubre entre dicho bloque, el Grupo de los 20 (G20), del que forma parte la Argentina, y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
La directiva, que permitirá asegurar una alícuota mínima del 15% para las grandes empresas, fue presentada este miércoles por la Comisión Europea (CE) -el órgano Ejecutivo de la UE- en Bruselas, según la agencia de noticias DPA.
De esta forma, el proyecto recoge el compromiso del bloque europeo con la reforma pactada en octubre junto con la OCDE y el G20, en el cual 136 países dieron su aval para la implementación de un impuesto mundial a las multinacionales del 15% a partir de 2023, y que permitirá, según la OCDE, "redistribuir a países de todo el mundo más de US$ 125.000 en beneficios".
“Nuestra propuesta es totalmente consistente con la versión final del modelo de normativa de la OCDE, que dispone los detalles para su aplicación”, manifestó hoy en conferencia de prensa Paolo Gentilioni, comisario de Economía en la CE.
La propuesta comprenderá a las grandes empresas, tanto nacionales como multinacionales, y del sector financiero, con ingresos de más de 750 millones de euros y con una filial o empresa subsidiaria en algún Estado miembro de la UE.
Asimismo, la norma busca que el pago del impuesto sea efectivo también en los casos en que las filiales de las compañías se encuentren en un paraíso fiscal fuera de la Unión.
El plan, que una vez adoptado por cada uno de los veintisiete países miembro entrará en vigor el 1 de enero de 2024, también incluye una segunda propuesta que coloca el foco sobre las empresas “fantasma” creadas para la evasión de impuestos.
Con el proyecto, la UE buscará que las entidades que posean una actividad económica mínima o nula en el bloque no puedan beneficiarse de ninguna ventaja fiscal, de manera tal que se limite la creación de este tipo de empresas.
De acuerdo con Gentilioni, la norma permitirá a las autoridades nacionales, a través de "una serie de criterios claros", identificar empresas fantasmas y que un Estado le pueda pedir explicaciones a otro sobre entidades que resulten sospechosas de ser usadas para evadir el pago de impuestos, un punto que tenía dificultades en el pasado.
"Esta propuesta pondrá más presión sobre las empresas fantasma, estableciendo normas de transparencia para que sea más fácil detectar el uso indebido de dichas entidades a efectos fiscales", agregó el funcionario italiano, quien la consideró como "un paso importante" en la "lucha contra la evasión fiscal en la UE".