Portuarios sostienen el conflicto y piden reincorporación de los trabajadores
La empresa Terminal Puerto Rosario presiona y no cede en la disputa que mantiene con el SUPA. El gremio realizó una asamblea donde sus afiliados decidieron continuar con la lucha hasta se restituya a los despedidos y se les conceda un aumento salarial.
La Seccional Rosario del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) lleva a cabo un paro de actividades en el puerto en protesta por 300 despidos y el riesgo que corren otros 500 puestos laborales, según denuncian desde esta organización gremial.
El gremio anunció en la mañana de este miércoles que si no se encuentra una solución a la situación que afecta a los trabajadores en esta terminal portuaria concesionada actualmente por la empresa Vicentin, está dispuesto a "regionalizar el conflicto".
En dialogo con Leo Ricciardino por Sí 98.9, el secretario gremial de SUPA, Cesar Aybar, manifestó que el acuerdo salarial previa volver a negociar si la inflación superaba los aumentos estipulados, situación que sucedió y que ante el reclamo de los trabajadores la respuesta de la empresa fue el despido de personal.
Sobre las cifras de despidos que circularon Aybar aclaró que nos e trata de 50 trabajadores estibadores, sino de más de 300, pertenecientes a toda la planta permanente que pertenece a esa terminal portuaria.
La medida de fuerza se originó en la madrugada, cuando 25 trabajadores debían ingresar a su turno y el personal de recursos humanos les negó el acceso tras informarles que estaban despidos, una situación que se repitió con el turno del mediodía, cuando se vieron afectados de la misma manera otros 25 obreros.
En ese contexto, el Sindicato de Estibadores de Rosario bloqueó el acceso a la Terminal Portuaria de Rosario (TPR) con vehículos e incendió neumáticos exigiendo que la empresa anule los telegramas de despidos, que esta mañana comenzaron a llegar a los hogares de los empleados.
La concesionaria del puerto afirma tener la necesidad de reducir su planta de 1000 a 200 operarios. Al mismo tiempo, la firma amenaza con despidos en plena discusión por paritarias, para revisión salarial que solicitó SUPA a partir de los niveles de inflación vigentes.
Aybar recordó que en el mes de agosto hubo un conflicto de similares características, donde los trabajadores se desayunaron con los despidos y hubo que llevar a cabo una medida de fuerza. “Lo que nos hace la empresa claramente es una extorsión porque pretenden que nosotros vayamos a trabajar sin tener una recomposición salarial”, dijo el dirigente.
En tanto, informó que en la asamblea que se prestó este mediodía, la decisión de los trabajadores fue no dar un paso atrás con la medida de fuerza y sostener la lucha hasta que la patronal tome el reclamo de reincorporar a los despedidos y un incremento salarial del 60%.
“Acá está claro que la empresa busca un conflicto de esta naturaleza para tirarle un muerto al gobierno, claramente aquí hay un trasfondo, una cortina de humo para presionar y conseguir otro beneficios, por eso debemos plantearnos si queremos este tipo de empresas”, apuntó.
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