Durante julio la provincia de Santa Fe volvió a sufrir pérdidas laborales producto de la recesión económica que no da tregua en los primeros meses de Milei. Se oficializaron 1.000 puestos privados menos respecto al mes previo y desde diciembre la región acumula 12.600 pérdidas. 

Los datos se desprenden del último informe del Centro de Economía Política Argentina (Cepa), en el que destacaron que en la comparación interanual los tres sectores más afectados son: Construcción (-11,6%), Hotelería y Restaurantes (-3,2%), Servicios Inmobiliarios, Empresariales y de Alquiler (-2,6%). Cabe destacar que los números corresponden a los últimos datos oficiales disponibles.

Al igual que a nivel nacional, la construcción es el sector más afectado debido a la decisión del gobierno nacional de paralizar la obra pública. En este contexto, se torna necesario incorporar al análisis la composición del empleo privado registrado en la provincia. La construcción abarcaba, al primer trimestre de 2024, un 6,0% de los puestos de trabajo. 

La principal actividad económica en materia de empleo en el sector privado es la industria manufacturera, que explica un cuarto del total. En segundo orden de importancia se encuentra el comercio, con un 20% del total.

En el informe destacaron que la distribución de los puestos por sector es relevante en el marco de la aprobación en el Congreso de la Nación del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), con el cual se pretende “dinamizar” el empleo en el país. 

Dicho Régimen apunta a atraer inversiones que dinamicen determinados sectores de actividad: la minería, la siderurgia y los hidrocarburos. Sin embargo, si analizamos la incidencia que tienen estos sectores sobre el empleo registrado privado, encontramos que su participación alcanza solo el 5,1% del total.

Otra de las cuestiones que remarcan desde Cepa, tiene que ver con que el gobierno impulsa reformas laborales (de flexibilización, por ejemplo, a través de la nueva figura del “colaborador”) sostenidas bajo el argumento de que “en Argentina hace 10 años que no se genera empleo privado”. En ese marco, desagregaron datos para entender qué sucedió al interior del período.

Lejos de ser un período homogéneo, la evolución del empleo en la provincia no fue ajena al modelo económico sostenido a nivel nacional. Mientras que en las etapas en las que se puso el foco en lo productivo, se creó empleo, cuando se potenció un esquema de valorización financiera, se destruyeron puestos de trabajo. 

“Ante un nuevo intento de apertura, liberalización y desregulación de la economía, resulta imperioso poner en el centro de la escena esta cuestión”, señalaron.

En lo que refiere a la evolución de los puestos de trabajo según las jurisdicciones, en el mes de julio de 2024, 8 de las 24 registraron un incremento del empleo: Córdoba (76), Santa Cruz (99), Tierra del Fuego (100), Corrientes (129), Chubut (167), Jujuy (192), Tucumán (206) y Neuquén (1.007). Por el contrario, 16 perdieron empleo, lideradas por Buenos Aires (-5.292), CABA (-1.439) y Chaco (- 1.079).

Se pueden distinguir tres grupos de jurisdicciones: 

• Un grupo muy reducido logró aumentar la cantidad de puestos de trabajo: Tucumán, Salta, Chubut, Río Negro y Neuquén; 

• El grupo más numeroso, dentro del cual se encuentra Santa Fe (-2,4%), redujo sus puestos de trabajo entre 0,1% y 5,0%. La acompañan Mendoza, CABA, Córdoba, Jujuy, Corrientes, Entre Ríos, Buenos Aires y La Pampa; 

• Entre las más perjudicadas, aquellas cuya caída es superior a 5%: San Luis, Chaco, Misiones, Formosa, La Rioja, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Santa Cruz, Catamarca y San Juan.