Si algo le faltaba a esta campaña electoral era que la candidata a diputada nacional del Partido Popular, Amalia Granata, denunciara que personas anónimas quisieron "comprar" a dos postulantes que la acompañan "para que se caiga mi lista".

Según dijo Granata, uno de los llamados se produjo este viernes y, otro, la semana pasada, y que tuvieron como destinatarios a dos integrantes de su nómina de candidatos.

Granata le apuntó al massismo por la maniobra: "Les dijeron que (el candidato a diputado Diego) Giuliano sería diputado si se cae mi lista; no tuvieron ningún cuidado, fueron directos".

"Poné un precio", aseguró que fue lo que desconocidos les dijeron a los miembros de su espacio político. La candidata sostuvo que los llamados fueron "anónimos". "Supongo que era para ver si entraban en ese juego y después negociar", añadió, y aclaró que no tienen identificadas a las personas que llamaron. También dijo que un dirigente del Partido Popular recibió un llamado similar con idéntico planteo.

La postulante a la Cámara baja nacional afirmó a esta agencia que "lo que quiere la vieja política de Santa Fe" es mantener el estado de cosas. "Son estructuras que no quieren que gente nueva ingrese a la política, porque quieren seguir siempre los mismos", se quejó. Y añadió: "Cuando traes propuestas y proyectos de leyes molesta, porque ningún candidato presentó una propuesta firme e interesante".

La lista que encabeza Granata sufrió hace dos semanas cinco bajas del sector de UNA, una de las fuerzas que componen su alianza. "Cuando se estaba terminando la lista para presentarla a la Justicia Electoral se bajaron cinco personas de UNA, para tumbar la lista", explicó, y agregó que con ese sector mantenía "algunos desacuerdos". "Nos avisaron que eso iba a pasar y pudimos solucionarlo subiendo a los candidatos suplentes, pero la idea era la misma", concluyó.

(Télam)