Cerraron las elecciones en Chaco con un 68% de concurrencia
En unas elecciones marcadas por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, a las 18 se dio cierre oficial a los comicios en donde se eligieron gobernador, vice, diputados e intendentes y concejales de la mayoría de los municipios.
Las elecciones en la provincia de Chaco cerraron esta tarde con una concurrencia cercana al 68 % del padrón electoral de más de un millón de electores.
En estos comicios, marcados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, se dirimió la elección del nuevo gobernador y vice provincial entre el peronista Jorge Capitanich y el candidato de Juntos por el Cambio, Leandro Zdero, como así también se definieron 16 nuevos diputados provinciales e intendentes y concejales de la mayoría de los municipios chaqueños, con excepción de Resistencia, Makallé y Quitilipi.
Chaco es una de las cuatro provincias del país que cuentan con balotaje, como a nivel nacional, en caso de que el candidato a gobernador no supere el 45 % de los votos en primera vuelta, o el 40 % con una diferencia igual o mayor a 10 puntos de su inmediato perseguidor.
La mayoría de las encuestas apuntaron en la previa a que justamente el escenario de balotaje es el más probable, y que el mismo en caso de ser necesario tendrá lugar el 8 de octubre.
Las PASO tuvieron lugar en junio pasado y estuvieron atravesadas por el escándalo en torno al femicidio de Cecilia Strzyzowski, que salpicó a Capitanich debido a sus vínculos con el dirigente social Emerenciano Sena, quien es uno de los siete imputados por el crimen junto a su mujer, Marcela Acuña, y su hijo César.
En ese marco, el oficialismo chaqueño fue superado en las PASO por Juntos por el Cambio, ya que éste último espacio logró con la suma de sus precandidatos a gobernador un 42,4% de los votos, frente al 37% del actual gobernador.
Capitanich buscó revertir la situación para retener la provincia para el peronismo, afrontando un eventual cuarto mandato tras el actual y los que ya llevó adelante en 2007-2011 y 2011- 2015.
Por su parte, el radical Zdero buscó repetir, o bien aumentar, su buena performance de las PASO para forzar un balotaje y luego dar el golpe y arrebatarle la provincia al justicialismo.
En tanto, al cierre de los comicios ya había arribado al territorio chaqueño la presidencialista de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich.