El Frente de Todos se purgó internamente y rechazó la proscripción de Cristina
La mesa política del FdT había sido convocada por el jefe de Estado para debatir los temas electorales rumbo a las primarias. La tensión interna sobrevoló la organización y el desarrollo del encuentro. El plan común es la búsqueda de unidad.
El Frente de Todos realizó el primer encuentro de su mesa política en una reunión que se extendió por más de cinco horas y terminó pasadas la 1.30 de la madrugada del viernes en la sede partidaria del PJ, que concluyó con un discurso del presidente Alberto Fernández y la difusión de un documento titulado "Democracia sin proscripciones. Unidad para transformar".
El texto fue debatido al detalle por todos los espacios políticos, sociales y sindicales que componen la coalición oficialista y en uno de sus puntos claves, en el párrafo quinto, hace explícito el compromiso de quienes integran la mesa de "disponer las acciones necesarias para impedir la proscripción de la compañera vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner".
Ese planteo subraya que el "liderazgo y potencia electoral" de la Vicepresidenta "no puede ser arrebatado" a los votantes del FdT, y apunta sobre el Poder Judicial al señalar que "no hay, o no debería haber, ningún poder económico, mediático o judicial capaz de decidir por encima de la voluntad popular".
Otro punto sustancial del documento advierte que una "parte fundamental de la estrategia" del oficialismo será "reforzar la unidad en la diversidad", para lo cual se propone "articular las diferentes miradas del FdT y también a quienes se quieran sumar a este proyecto por una Argentina que crezca con paz, igualdad y libertad".
En ese sentido, los dirigentes del FdT que estuvieron en el local de Matheu 130 coincidieron que el recurso para encontrar una síntesis entre esa diversidad serán las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). El presidente avisó que quiere competir aunque si ay otro candidato mejor podría dar un paso al costado.
De ese modo, los 33 participantes del encuentro coincidieron en que esa instancia de participación creada por ley será la mejor alternativa para definir las principales candidaturas de la coalición gobernante, un espacio plural y heterogéneo que incluye fuertes debates en su interior y no oculta sus diferencias.
Los 33 asistentes a la sede del PJ nacional reflejaron las distintas vertientes y posturas de la actualidad del oficialista, con la presencia de alrededor de cinco miembros por cada uno de los sectores que componen el FdT; entre los principales dirigentes estuvieron el ministro de Economía, Sergio Massa; el referente de La Cámpora y presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner; el ministro del Interior, Eduardo 'Wado' De Pedro; y los gobernadores Axel Kicillof y Jorge Capitanich, entre otros.
Por el kirchnerismo participaron el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense Andrés Larroque y la senadora Anabel Fernández Sagasti. Sorprendió la asistencia de Máximo Kirchner porque su participación no estaba prevista y además coincidía con su cumpleaños número 46.
Mientras que por el Frente Renovador de Massa se sentaron a la mesa la titular de Aysa, Malena Galmarini; la presidente de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau; el ministro de Transporte, Diego Giuliano; y los dirigentes Rubén Eslaiman y Juan Andreotti.
Entre los sindicalistas asistieron los cotitulares de la CGT Héctor Daer y Pablo Moyano, y por el sindicalismo cercano a la vicepresidenta Cristina Fernández fueron de la partida Hugo Yasky, Sergio Palazzo y Abel Furlán.