El paro nacional se instaló definitivo en Rosario desde este mediodía. Y aunque el transporte urbano de pasajeros seguirá hasta las 19, la actividad comercial ya cesó al menos en el área central, epicentro de la convocatoria de las centrales obreras.

En la plaza 25 de Mayo, frente al Palacio Municipal, convergieron varias columnas de gremios y organizaciones sociales que formaron una multitud, camino al Monumento a la Bandera, para participar del acto central.

El epicentro de las concentraciones populares en este mediodía explota de gente, y la manifestación transcurre ruidosa pero en total armonía y sin incidentes que motiven la intervención policial. 

Entre la multiplicidad de banderas, destaca la presencia de mucha gente de a pie que se acercó de manera espontánea e individual para ser parte de esta primera protesta general contra el gobierno de Javier Milei.

Una mujer joven, con su hija de la mano, fue elocuente: "Vine con ella para que sepa que es bueno luchar, reclamar, y por lo que no se quiere también. La patria no se vende. Es surrealista que Milei sea presidente, nunca imaginé esta situación en mi país, y que mi hija sepa que hay un montón de personas que luchan por nuestros derechos”, dijo. 

A su lado, alguien más sin identificación partidaria ni gremial, enumeró las razones de su enojo cívico: “La delegación de facultades es inaceptable, la privatización de las empresas, la derogación de la ley de tierras y de la ley de manejo del fuego. Todo va en contra de quienes laburamos todos los días, de quienes queremos nuestro país, nuestra tierra. Lamentablemente, Milei fue elegido por voluntad popular pero debe haber mucha gente arrepentida al ver que la casta está con él en este momento: Caputo, Sturzenegger, Bullrich”, reprobó.

Entre tantos sectores, también Asociación Inquilinos Agrupados. Su referente, Sebastián Artola, alertó sobre “esta situación límite para 10 millones de inquilinos en el país, 300.000 en Rosario, que enfrentamos aumentos del 400 por ciento, de ajustes cada 3 o 4 meses. Esto es insostenible. Venimos a exigirle a los legisladores que rechacen este DNU y la ley ómnibus”.

Un trabajador municipal apuntó a la brutal caída del poder adquisitivo. “Cincuenta por ciento menos en pocos días. No hay nada de lo que el presidente prometió en campaña. Esto ya lo padecimos históricamente, ahora se nos volvió encima”, dijo.

Un jubilado enfocó su bronca en el ejemplo del Pami Rosario y su director designado: Guido Orlandi, empresario ajeno a la temática de la obra social estatal y que llegó a bromear en pandemia con la letalidad del covid 19 como solución al déficit previsional. “El Pami está en manos de un individuo que no tiene noción de lo que dice. Nos quedaremos sin medicamentos ni prestaciones. Los jubilados debemos salir a la calle, no permitir que esto avance. La eliminación de los bonos, la falta de medicamentos, el cambio en la movilidad. El futuro es espantoso”, desesperó el hombre.  

La previa

La convocatoria de los gremios para iniciar este paro general contra el gobierno de Javier Milei había empezado a tomar cuerpo ya avanzada la mañana y bajo un sol que recalienta el pavimento y la protesta.

Distintas columnas del Sindicato de Recolección, Barrido y Limpieza, de Recibidores de Granos, Camioneros y varios más se congregaron en la esquina de avenida Pellegrini y Corrientes, y desde allí avanzaron hacia la plaza 25 de Mayo, donde confluirá la marcha convocada por CTAA y Movimiento Sindical Rosario desde plaza Montenegro. Por otro lado, una convocatoria de sindicatos alineados en CGT reunieron otra columna en plaza San Martín, también para marchar hacia el Monumento.

Y a medida que los gremios toman la calle, la actividad habitual del microcentro rosarino comenzó a menguar.

Una joven estudiante del Instituto de Profesorado “Bernardo Houssay”, sobre la plaza de Córdoba y Dorrego, expuso sus motivos para participar de la manifestación. “Soy estudiante y trabajo en casas particulares limpiando, cobro un sueldo super bajo, mis viejos son jubilados, cobran la mínima. Salgo por ellos, porque están negociando todo. La gente que votó a este gobierno lo votó supuestamente porque iba a atacar a la casta, no al pueblo como está ocurriendo. Así que siento que es ahora el momento de salir a la calle”, dijo.

Un hombre con su pequeño hijo sobre los hombros, opinó en el mismo sentido: “Hay que expresarse, hay que demostrar que el pueblo está sufriendo, que no se puede más. Hay que salir y decirle ”no" a esta forma de gobernar, a este rumbo que nos empobrece cada vez más".

Marcelo Andrada, titular del sindicato de recolectores de residuos, en tanto, se expresó desde Corrientes y Pellegrini, en la otra manifestación rumbo al Monumento. “Tenemos que revertir este DNU, hay diputados que representan al movimiento obrero y están en condiciones de revertir esto que va en contra de los trabajadores. Vuelven con el Impuesto a las Ganancias que afecta a miles de trabajadores que empezarán a pagarlos. Como la Argentina está partida en dos, la ciudadanía debe comprender que este estas leyes le sirven a unos pocos, como siempre en la historia. Unos pocos hacen más fortuna, y el pueblo queda afuera”, dijo.

Andrada advirtió que “el movimiento obrero no saldrá de la calle” y alegó que “el paro no es temprano, porque todos estamos ya sufriendo las medidas de este gobierno. Ya hay suspensiones en fábricas. Somos los últimos orejones del tarro”. 

Es la escena previa a lo que será el acto central en el Monumento, previsto para las 13.