El expresidente de Bolivia, Evo Morales, denunció que intentaron detenerlo este domingo por la mañana mientras se dirigía a su programa de radio, en un incidente en el que afirmó que dispararon en varias ocasiones contra el vehículo en el que se encontraba como copiloto.

Morales señaló que el ataque tuvo lugar alrededor de las 06:25 (hora local), cuando al pasar frente a la Novena División de Villa Tunari fueron interceptados por dos vagonetas que, según su testimonio, comenzaron a disparar. En el video, Morales aparece en el asiento del copiloto solicitando ayuda para bloquear el paso y dificultar la persecución.

El exmandatario boliviano señaló que durante el enfrentamiento su chofer resultó herido, con cortes visibles en la cabeza y una lesión en el brazo. Morales afirmó que, a pesar de las heridas de su chofer y el peligro de la situación, lograron salir ilesos del ataque. “Felizmente salvamos la vida”, remarcó.

No es el primer hecho de estas características. Desde hace una semana el expresidente viene denunciando distintos hechos de violencia contra la sede de su partidos, aliados de militancias y espacio político. El viernes difundió un vídeo de como un “grupo fachista”, según su declaración, vandalizaba y robaba en uno de sus locales. Y el jueves mostró imágenes de un ataque a balazos contra el auto del  exdefensor del Pueblo Nelson Cox. 

“El fascismo está retornando al país de la mano del gobierno de Luis Arce. Nuestra solidaridad con el compañero Cox”, escribió en un comunicado ampliamente difundido.

Hasta el momento, las autoridades bolivianas no han emitido un comunicado oficial sobre el incidente denunciado por Morales. El expresidente, líder del Movimiento al Socialismo (MAS) y figura política influyente en Bolivia, ha mantenido una relación conflictiva con Arce desde la transición del poder en 2020. Los desacuerdos públicos entre ambos se han intensificado en los últimos meses, en medio de acusaciones mutuas y un clima político polarizado en el país.