Ariel González Zeballos llegó al playón de la estación Axion, de Baigorria y Boedo, en la entrada al barrio Parque Field, este sábado por la noche, en su Mercedes Benz color negro. Puso el freno de manos, apagó el motor del lujoso automóvil y se preparó para descender del mismo.

Al abrir la puerta, escuchó el sonido de una moto que se aproximaba a gran velocidad y disminuía abruptamente su marcha. Con un rápido golpe de vista, el letrado pudo ver que los ocupantes del rodado no habían arribado al lugar para cargar combustible, sino para solucionar "un problema previo", dijo la fiscal Marisol Fabbro, a cargo de la pesquisa.

En pocos segundos, el sicario que se sentaba en la parte trasera de la moto, como acompañante, abrió fuego sobre González Zeballos sin mediar palabra, pero el arma se trabó y el ataque se complicó. Ante esta tensa situación, el agresor se bajó del rodado, caminó hasta el lujoso auto, abrió la puerta del conductor y volvió a gatillar, "una o dos veces más", dentro del vehículo.

Ya conforme con su desempeño, el pistolero se subió a la moto de su compañeros y ambos hueron a toda velocidad.

"Nadie puede reconocer a los autores del hecho", aseguró Fabbro, de la Unidad de Homicidios Dolosos, en diálogo con el móvil de Sí 98.9, y afirmó que no se descarta ninguna hipótesis pero "en principio, el ataque podría ser por un problema previo".

"Todavía no puedo brindar información sobre el teléfono porque se necesita una huella para desbloquearlo y el día de hoy, con autorización de los familiares y el hospital donde está internado (Eva Perón de Granadero Baigorria) vamos destrabar el celular", señaló la funcionaria judicial.

Sobre la asistencia que recibió el abogado, por parte de una mujer, Fabbro dijo: "Sabemos que consiguió mandarle un mensaje a una femenino que tenía un comercio cerca del lugar, para que ella vaya a ayudarlo". 

Además, del teléfono celular de la víctima se secuestró  la llave del vehículo y unos 100 mil pesos en efectivo.

Fiscal de Homicidios Marisol Fabbro. (Rosarioplus)

González Zeballos sigue internado en estado reservado, en coma inducido con asistencia respiratoria mecánica.

El archivo arroja que González Zeballos fue el defensor penal de Ezequiel "Parásito" Fernández, quien fue liquidado en 2018 en Granadero Baigorria junto con otros dos hombres más, y también dentro de un auto. José Fernández (hermano de Ezequiel), y Gerardo Abregú fueron los otros dos asesinados. Todos tenían antecedentes penales y se dijo que habían sido sicarios de la banda Los Monos. El triple crimen que conmocionó a la ciudad vecina fue atribuido a la gavilla de Esteban Alvarado. De hecho, hay uno de sus hombres –Mauricio Laferrara– imputado como el autor material de esa matanza. La hipótesis fiscal señala que Alvarado tenía el dato de que Parásito Fernández tenía orden de asesinarlo, y él entonces se anticipó.

Antes, González Zeballos fue uno de los detenidos en una red de allanamientos dispuestos por el juzgado federal de Campana, en investigación sobre Mario Segovia (el rey de la efedrina). Se le atribuyó al abogado haberse dedicado a maniobras de lavado de activos para la organización del célebre traficante.