Cacería policial: fiscal reveló un peritaje clave y los deudos salieron al cruce
El fiscal a cargo de la causa comunicó que el barrido electrónico halló rastros de pólvora en las manos de una de las víctimas, peritaje que podría sugerir la existencia de un disparo previo a la fatal balacera. La familia del joven asesinado dijo que era un "resultado esperable" porque la policía puso eso luego del fusilamiento, para simular un tiroteo cruzado
La investigación por la persecución y balacera policial que el 23 de junio terminó con dos jóvenes acribillados en Arijón y Callao avanzó con el resultado de un peritaje clave: el barrido electrónico realizado a las víctimas para poder corroborar o no la existencia de disparos realizados desde el auto perseguido, tal como sostienen los uniformados que participaron del hecho para justificar su accionar.
El fiscal Adrián Spelta, a cargo de la causa, comunicó en rueda de prensa que la prueba --realizada por el Conicet-- estableció que en las dos manos de David Campos (28 años), quien viajaba en el asiento del acompañante, había resto de plomo, bario y antimonio, que son componentes del material utilizado en los proyectiles (pólvora) y que aparecen en los residuos del disparo de un arma de fuego.
"Esta es una evidencia objetiva que ya tenemos", dijo el fiscal, quien aclaró que no es algo "concluyente", que la causa no cambia de rumbo y que el expediente sigue enfocado en determinar las responsabilidades de los 22 policías que están siendo investigados.
Spelta detalló además que todavía falta el resultado de otros peritajes fundamentales, como el balístico, que permitirá saber con exactitud desde dónde salieron las balas policiales (quién o quiénes dispararon contra los jóvenes) y el historial (últimas detonaciones) de las dos armas vetustas que la policía dice haber encontrado en el auto de las víctimas.
También adelantó que ya recibieron toda la información de los teléfonos celulares de los policías que fueron enviados a peritar y que ahora solo falta analizar los 400 GB recuperados para saber si se encuentran conversaciones o mensajes relevantes para la investigación. Por último, informó los resultados finales de las autopsias. El cuerpo de Emanuel Medina (32 años) tenía 9 orificios de bala y cuatro proyectiles en su interior, mientras que el de Campos contaba con cuatro orificios y dos balas.
La respuesta de las familias de las víctimas
En diálogo con Rosarioplus.com, Germán, el hermano de David, aseguró que "era de esperar" un resultado positivo debido a que durante más de una hora los cuerpos y el auto estuvieron a "disposición de la policía". "Sabemos que les plantaron armas y les pusieron pólvora en la manos para simular un enfrentamiento. Spelta llegó más de una hora tarde al lugar. Durante ese tiempo armaron todo", denunció.
El joven señaló que ambas familias están "sorprendidas" por la decisión de Spelta de brindar una conferencia de prensa con el resultado de una sola prueba, que ni siquiera es "categórica o concluyente", debido a que, según los especialistas, que no haya residuos no significa que una persona no hay disparado y que el resultado de positivo tampoco asegura que haya efectuado en disparo.
"Los resultados de las pruebas para comprobar el desproporcionado accionar policial no están. Creemos que hay una intención de Spelta de preparar el terreno para justificar más adelante la balacera policial", se quejó Germán.