A partir de un trabajo coordinado con la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, el equipo de la Central de Inteligencia y Operaciones Especiales de Santa Fe logró detener el pasado sábado a Jonatan Riquelme en un operativo realizado en el barrio porteño de Caballito.

La detención se produjo cuando los agentes lo observaron junto a su pareja, Jael G., salir de un edificio ubicado en Colpayo al 300 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Ambos fueron aprehendidos inmediatamente por la Policía de Santa Fe y la División Antidrogas de la Policía de la Ciudad, que colaboró en el operativo. 

Sobre Jonatan Riquelme pesaba un pedido de captura por delitos relacionados con la banda liderada por su hermano, Fran Riquelme, y con vinculación con el clan Alvarado. En tanto, Fran Riquelme está sindicado como líder de una banda narco y se encuentra preso en la cárcel federal de Marcos Paz.

El secretario de Análisis y Gestión de la Información del Ministerio de Justicia y Seguridad, Esteban Santantino, destacó que “la detención de Riquelme no es un hecho aislado; se dio el sábado a la madrugada con un trabajo muy serio y sostenido, buscando información, datos y trabajando en conjunto con la Policía de la ciudad de Buenos Aires, con el Ministerio de Justicia y Seguridad de Buenos Aires y una vez producida la captura lo trasladamos a la cárcel de Piñero. Esto responde a que es un detenido de alto perfil en la provincia de Santa Fe por un hecho de homicidio y más elementos que sabrá la Fiscalía como trabajarlos”.

Además, resaltó el trabajo que se viene realizando desde el comienzo de la actual gestión. “Quizás no somos del todo conscientes de lo que está viviendo la provincia de Santa Fe, pero la captura de (Mauricio) Laferrara, de (Licha) Contreras y esta captura de Riquelme, significan que estamos viviendo un momento histórico con la Central de Inteligencia y operaciones especiales. Es la primera experiencia a nivel nacional en el marco de la implementación de una ley de inteligencia provincial”, enfatizó.