El hombre que este domingo a la noche murió asesinado en una esquina del barrio Bolatti, en zona sudoeste, vivía en esa cuadra y quienes lo mataron eran dos hombres que habían pasado en un auto. El crimen agitó al barrio y varios vecinos reaccionaron con furia contra el vehículo de los homicidas, contra una mujer que quedó en la escena, y contra los policías que acudieron más tarde.

Era alrededor de las 9 de la noche. Según la versión oficial, el muchacho –identificado como Jonatan Natanael Rodríguez– le había pedido un rato antes al conductor de un Chevrolet Corsa de color negro, cuando pasó por la esquina del pasaje 1847 y Campbell (Seguí al 6300), que aminorara la velocidad.

Como respuesta, el auto frenó y de allí descendieron dos hombres que entablaron una discusión con quien les había recriminado su conducción temeraria. 

La disputa pronto pasó a los golpes dos contra uno. Y como remate, uno de los desconocidos sacó una pistola y ejecutó a Jonatan a quemarropa con al menos 3 disparos, según confirmaría luego el médico forense. 

La versión partió de boca de testigos presenciales citadas por voceros de la Unidad Regional II de Policía. Los dos que atacaron al vecino escaparon a la carrera por un pasillo de la villa y dejaron abandonado el automóvil y a una mujer joven, de unos 30 años, que quedó como blanco de la reacción de la gente. 

La situación se encauzó un poco cuando arribaron patrulleros policiales, pero no del todo. Los vecinos, entre la consternación por uno de ellos ya muerto, y la indignación, también reaccionaron contra los agentes del Comando Radioeléctrico. 

Los policías, a las órdenes del fiscal Adrián Spelta, recogieron 3 vainas servidas de bala calibre 9 milímetros, y un pendrive que estaba junto al auto de los homicidas.

Una vecina confirmó a los policías el motivo que desencadenó el desenlace fatal: Jonatan les había pedido a los del auto que disminuyeran la marcha al circular para que no atropellaran a nadie.