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Una mujer denunció que su hija, con retraso madurativo, fue abusada sexualmente en un patrullero y por el hecho separaron de manera preventiva a dos efectivos del Comando de Patrullas de la localidad bonaerense de San Nicolás. Los fiscales piden “prudencia” para no entorpecer la investigación de un hecho que habría ocurrido hace más de un mes.

De acuerdo con la denuncia formulada ante la fiscal Franca Padulo, titular de la Unidad Fiscal de Instrucción 2 de San Nicolás, el hecho ocurrió el domingo 3 de agosto y fue denunciado el martes último por la madre de la joven de 26 años.

La mujer aseguró que su hija fue "sometida a vejaciones y forzamientos para finalizar el acto no consentido" cuando era trasladada en un móvil del Comando de Patrullas de esta localidad bonaerense.

La fiscal Padula precisó en declaraciones a la agencia Télam que "aún no está acreditada la existencia del hecho porque todavía no se le pudo tomar declaración testimonial a la joven, debido a los recaudos que se deben tomar por su retraso madurativo".

No obstante, fuentes policiales indicaron que el capitán Sixto Berón y el oficial Alexis Escalante fueron separados de sus cargos por Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense, hasta que concluya la investigación judicial caratulada "abuso sexual doblemente agravado por la participación de dos personas y su condición de miembros de una fuerza de seguridad".

Según consta en la denuncia, el domingo 3 de agosto, alrededor de las 18.30, la joven se encontraba junto a su novio en la puerta de una Iglesia Evangélica, en inmediaciones de Presidente Perón y La Rioja, cuando se detuvo un patrullero y dos efectivos les solicitaron que se identificaran.

La denunciante manifestó que los uniformados establecieron la existencia de un pedido de averiguación de paradero de la chica, activo desde el año 2013, por lo que la trasladaron para los recaudos legales a la sede de la comisaría Primera de esta localidad.

Luego se determinó el traslado de la joven a su domicilio y, según la denuncia, en el trayecto los sospechosos detuvieron el móvil en un descampado, donde uno de ellos quedó al volante, mientras que el otro cometió la violación.

"Si bien hasta el momento no se pueden brindar mayores precisiones por la gravedad institucional que representa, el hecho justifica prudencia para no entorpecer la investigación" dijo la fiscal.

(Télam)