Dieron vacaciones masivas a policías y a Brilloni no le gustó nada
En pleno descontrol de la calle y sus episodios violentos, demasiado personal de seguridad estuvo de licencia. "Hace dos semanas teníamos 811 efectivos de vacaciones, es mucho", se contrarió el ministro de Seguridad provincial en reproche a su antecesor, Rubén Rimoldi. Y sostuvo que encontró "una institución que ha sido debilitada”.
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni, dejó entrever un malestar interno de su cartera que se rumoreó en los últimos días: el reproche hacia su antecesor, Rubén Rimoldi, por haber autorizado una licencia masiva de policías justo en el pico de la ola de homicidios que solo en enero dejó 56 asesinatos en Rosario.
“Hasta hace dos semanas atrás teníamos 811 efectivos de vacaciones, afortunadamente se están incorporando”, indicó el ex comandante de Gendarmería, en diálogo con Ariel Bulsicco en Sí 98.9. “Hay que tener en cuenta que enero y febrero de 2024 no se puede tener de vacaciones a un número tan importante”, afirmó en tono crítico para el ex ministro que salió eyectado de su función luego de una balacera mafiosa contra la sede del Centro de Distrito Municipal Sudoeste, en barrio Acindar.
En cuanto a las condiciones en las cuales encontró a la Policía cuando asumió, hace un poco más de un mes, el ministro dijo: “Hemos recibido una institución que ha sido debilitada en su fortaleza institucional”. “Hay funcionarios policiales que han equivocado el camino y se cruzaron de vereda”.
Respecto de las condiciones de trabajo de las fuerzas, el titular de la cartera de Seguridad aclaró que se encuentra abocado a la tarea de mejorar varios aspectos de la institución, como el salario, la logística y tecnología, etc.
Sobre la cantidad de personal que posee la fuerza, Brilloni expresó: "Siempre hace falta más, considero que con los próximos egresos de las nuevas generaciones de policías, vamos a estar bien". Sin embargo, el funcionario aclaró que los nuevos agentes no se van “a ver este año, pero tenemos que pensar en el largo plazo”.
“Nos hemos encontrado con la falta de entrenamiento, hemos tenido que rehabilitar polígonos de tiro porque el personal no tenía donde tirar. Hay policías que hace 8 años ni siquiera tenían práctica de desarme de arma”, indicó.
Por último, el ministro de Seguridad señaló que “se están obteniendo resultados importantes". "El año pasado, solamente en Rosario se llegaron a incautar 700 armas de fuego. No es sufiente, hay que redoblar los esfuerzos, dijo.