En el inicio del juicio oral contra un mecánico de motos por doble homicidio agravado, el fiscal Alejandro Ferlazzo pidió una pena de 25 años de prisión efectiva contra el acusado. Y así se revive esos dos asesinatos simultáneos que estremecieron el 31 de octubre de 2020 a una Rosario en pandemia y todavía estremecida por los estertores de la violencia urbana.

Pero el trasfondo del crimen de los hermanos Agustín y Gastón Jaime (de 16 y 24 años, respectivamente) no es el del narcotráfico sino de la venganza extrema por un robo callejero a una mujer, familiar de uno de los perseguidores de las víctimas. El autor material de los disparos, Juan Cruz Morel, ya fue condenado. Ahora es el turno de su amigo, Diego Zapata, de 29 años, quien aquella noche condujo el Renault Clío con el que salieron a cazar a los hermanos Jaime por las calles del barrio Alvear.

Ante los jueces Mariano Aliau, Gonzalo Fernández Bussy y Silvana Lamas, el fiscal comenzó este martes en el Centro de Justicia Penal a relatar la acusación contra Zapata, un mecánico de motos radicado en ese mismo barrio donde desató una furiosa cacería la noche del 31 de octubre de 2020. El detonante fue un arrebato callejero contra una mujer en Biedma y Santa Matilde (cerca de bulevar Seguí y Avellaneda). Por alguna razón, los acusados -Morel y Zapata- atribuyeron ese robo a los hermanos Jaime y los buscaron, siempre dentro de las calles del barrio.

Hacia las once de la noche, los Jaime salieron de la casa paterna, en Seguí y Lavalle, a bordo de una Yamaha Crypton con el fin de comprar choripanes para la cena familiar. Nunca regresaron. 

A poco de salir, Zapata y Morel los siguieron en un Renault Clío, y al interceptarlos en Seguí y Castellanos, Morel descendió y abrió fuego no sin antes espetarles “Te dije, chorro de mierda, que te iba a agarrar”. Disparó entre 8 y 10 tiros con una pistola plateada, y ante la vista de testigos que luego sellaron su condena penal. Los mismos que ahora complican también a Zapata. 

Uno de los jóvenes en moto cayó herido de muerte en Castellanos antes de llegar a 24 de Setiembre. El otro aceleró un poco más, pero en la cuadra entre Saavedra y Uruguay chocó un auto estacionado y cayó sin vida.

Los del Clío escaparon de la escena y caerían detenidos tiempo después. 

Morel reconoció la autoría del doble crimen, y en juicio abreviado del 28 de mayo del año pasado aceptó una pena de 29 años de prisión por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, dos hechos, y portación ilegal de arma de fuego de guerra, todo en concurso real entre sí en calidad de coautor y autor respectivamente. Ahora el fiscal Ferlazzo tiene en el banquillo a Zapata, quien está en prisión preventiva desde 2022, y enfrenta un pedido de sentencia de 25 años de cárcel efectiva.