La Procunar alerta sobre los delitos en Rosario encargados desde prisión
La Procuradoría de Narcocriminalidad presentó un extenso trabajo sobre líderes de bandas que instigan crímenes por teléfono desde las cárceles de Coronda y Piñero. Entre los nombrados, aparecen Cantero, Funes y Ungaro. Piden cumplir con la ley que habla de inhibir señales en las cárceles.
Rosario es el epicentro este jueves del debate sobre el narcotráfico por la presencia en la ciudad de los integrantes de la Corte Suprema Nacional y jueces federales de todo el país. En la sede de la Facultad de Derecho de la UNR se planteará el interrogante sobre los motivos para que no avancen las causas judiciales contra líderes narco, en una región asolada por delitos y homicidios vinculados a la disputa por el territorio para la venta de drogas. Y en ese marco, el intendente Pablo Javkin se reunió con Diego Iglesias, titular de la Procuradoría de Narcocriminalidad (PROCUNAR), para analizar la situación de la ciudad. Allí se analizó un documento con el análisis de lo que pasa en las cárceles, por la preocupación de que muchas veces un detenido por drogas siga cometiendo delitos desde la prisión. En el trabajo, hay mención a varios líderes de bandas locales. RosarioPlus pudo acceder al material y lo que sigue es una síntesis del mismo.
El documento, de 66 carillas, fue elaborado en septiembre de 2021 y se elevó a la Procuradoría General de la Nación. En su introducción establece: "Se llevó a cabo una reseña de una serie de casos en los que se evidenciaron maniobras de tráfico, transporte y comercialización de estupefacientes y de otros graves delitos vinculados (como el lavado de activos, homicidios, secuestros extorsivos, amenazas, amenazas coactivas o tenencia y tráfico de armas de guerra), que fueron planificadas o llevadas a cabo desde el interior de los establecimientos penitenciarios por parte de personas que se encontraban privadas de su libertad cumpliendo condenas o prisiones preventivas por la comisión de otros delitos similares".
A la hora de definir el fenómeno, el material elaborado por PROCUNAR indica: "Se detectó la existencia de personas que ocuparon los eslabones jerárquicos superiores de organizaciones o bandas narcocriminales de gran complejidad e influencia en sus territorios y que, luego de ser condenados o procesados y privados de su libertad, continuaron interviniendo en estas maniobras desde los establecimientos penitenciarios en los que se encontraban detenidas. Asimismo, también se vio, con gran preocupación, cómo en muchos casos estas personas también habían sido previamente condenadas por haber cometido otros delitos desde el interior de las cárceles y pese a ello pudieron repetir esos patrones de conductas criminales".
En las siguientes páginas, el trabajo confirma la decisión de la Procuraduría de Narcocriminalidad de poner este tema en agenda y abordarlo institucionalmente. Entre otras cosas, el documento manifiesta que existen artículos de la Ley Penal que hablan de inhibir señales de telefonía celular en las cárceles, también hay un extenso repaso de las características que configuran los denominados presos de alto perfil.
"Dar un estricto cumplimiento a la prohibición de las comunicaciones telefónicas a través de equipos o terminales móviles dentro de los establecimientos penitenciarios, expresamente prevista en el artículo 160, segundo párrafo de la ley 24.660", señala a la hora de las recomendaciones en el capítulo final del trabajo.
Lo que muestran las crónicas periodísticas -y lo releva también el material de PROCUNAR- es que hay corrupción o ineficacia del personal de los servicios penitenciarios y un aceitado mecanismo entre familiares y visitas de los detenidos, para permitir que incluso detenidos, siga habiendo conducción de bandas criminales.
Los casos analizados
En la parte final del trabajo, se analizan casos específicos en los que hubo delitos organizados desde la cárcel. Se nombran prisiones de varios puntos del país, con Coronda, Piñero y las bandas que actúan en la ciudad, como nodos clave. Lo que siguen son las menciones:
Caso “Cantero y Vilches” - FRO 37768/2015 UNIDAD 6 - INSTITUTO DE SEGURIDAD Y RESOCIALIZACIÓN - RAWSON – SPF y UNIDAD PENITENCIARIA Nº 11 - PIÑERO - ROSARIO: Servicio Penitenciario Santa Fe. En este caso que involucró a la organización conocida como “Los Monos”, se investigó la actividad ilícita de Ariel Máximo “Guille” Cantero durante su encierro en la Unidad 6 del Servicio Penitenciario Federal, conocido como Penal de Rawson, y de Leandro Vilches, alias “Gordo”, detenido en la Unidad Penitenciaria provincial de Piñero
Caso “Cantero” - FRO 48369/2017 - UNIDAD PENAL N° 1 INSTITUTO CORRECCIONAL MODELO DE CORONDA: Servicio Penitenciario Santa Fe, que involucró a Ariel Máximo “Guille” Cantero, quien organizó la privación de libertad desde un teléfono fijo que utilizaba en su lugar de detención, la Unidad 1 de Coronda.
Caso “Funes - Ungaro” - FRO 39419/2016 - UNIDAD PENITENCIARIA Nº 11 - PIÑERO - ROSARIO – Servicio Penitenciario Santa Fe, que involucró a René Ungaro.
Caso “Barrio 7 de septiembre” - FRO 2749/2020 - UNIDAD PENAL N° 1 INSTITUTO CORRECCIONAL MODELO DE CORONDA – Servicio Penitenciario Santa Fe, que involucró a Gustavo Carlos Martinotti.
Caso “Jure” - FRO 22822/2016 - UNIDAD PENAL N° 1 INSTITUTO CORRECCIONAL MODELO DE CORONDA – Servicio Penitenciario Santa Fe, que involucró a Walter Daniel Jure.
Caso “Gómez” - FRO 6246/2021 - UNIDAD PENITENCIARIA Nº 11 - PIÑERO - ROSARIO – Servicio Penitenciario Santa Fe, que involucró a Miqueas Fernando Gómez.
El informe completo, en archivo adjunto para descargar.
