Con un comunicado oficial dado a conocer en los medios, la concesionaria TPR que maneja el puerto de Rosario aseguró haber saldado el conflicto que llevaba casi tres meses por los despidos a un grupo de estibadores a partir de un convenio con la cartera de Trabajo de Nación y el gremio SUPA.

Aseguraron en la misiva que "se abre una nueva etapa", y elogiaron el accionar de los efectivos policiales y de Prefectura durante el tiempo que llevó el conflicto "para desbaratar los intentos de aquellos que militaron contra el acuerdo y el retorno de las operaciones". Un conflicto, cabe destacar, hace una semana terminó con menores y una comisaria heridos por los enfrentamientos y gases lacrimógenos. 

El conflicto comenzó en noviembre cuando en una paritaria los portuarios reclamaron recomponer sus salarios, y se suscitaron los despidos del contingente por el que luego SUPA comenzó las negociaciones de reincorporación. A comienzos de diciembre el clima escaló en violencia cuando los portuarios no percibían sus sueldos, y el 15 de diciembre la furia rompió en estampida desde el Concejo de Rosario hacia el Municipio, generando destrozos en la puerta de ingreso. Entonces SUPA y el TPR acordaron la reincorporación de 20 empleados, y lejos de cesar el conflicto, comenzó un plan de lucha de familias de los estibadores que continuaban despedidos, y el choque con las fuerzas llegó en varias ocasiones a la violencia física, hasta la semana pasada.

El comunicado:

"Habiendo transcurrido un par de semanas desde la firma del acuerdo entre Empresa y Sindicato, rubricado por la Ministra de Trabajo de la Nación, el conflicto tuvo un cierre definitivo.

Cabe destacar el trabajo conjunto de la Fiscalía Provincial n°3, Ministerio de Seguridad, liderado por su secretario Claudio Brilloni, policía de la provincia de Santa Fe y Prefectura local de Rosario, para desbaratar los intentos de aquellos que militaron contra el acuerdo y el retorno seguro de las operaciones.

Así como también agradecer el apoyo decisivo de nuestros clientes, cámaras industriales, proveedores y socios estratégicos en pos de la regularización de esta actividad clave para el desarrollo de la región y del país.

Hoy iniciamos una nueva etapa en TPR. Defendimos nuestros valores a ultranza y resolvimos cuestiones fundamentales.

Un puerto que aporta empleo directo e indirecto para más de 1000 familias en Rosario, eje estratégico del comercio internacional, a partir de su ubicación y su reconocida calidad de servicio.

Seguiremos construyendo sobre valores tan esenciales como el respeto y la seguridad, con pasión, excelencia operativa y servicio, en pos del crecimiento de nuestros clientes, nuestra gente y la comunidad que nos rodea”.