Los implicados en el crimen de Bam bam fueron imputados, pero por portación
Los jóvenes detenidos el pasado miércoles en una casa de familiares de Tubi Segovia en un country de Pueblo Esther en el marco de una investigación por el homicidio de Jonathan “Bam bam” Funes fueron imputados este viernes, pero la calificación no los relaciona con el asesinato, sino con la tenencia ilegal de varias armas de fuego que la policía encontró en ese domicilio. También en ese allanamiento hubo decomiso de drogas, algo por lo que se derivó notificación a la Justicia Federal.
Georgina Segovia de 26 años, Ezequiel Romero de 18, y Milton Barea de 21 –detenidos en el barrio cerrado Campos de Esther– y la pareja colombiana detenida en Machado al 5900 (barrio Belgrano) compuesta por Daniel Mosqueda Figueroa y Angie Ruiz Herreñu –ambos de 22 años–, permanecerán detenidos por el delito de tenencia y portación ilegítima de arma de fuego de guerra civil.
El operativo realizado por la Policía Federal en base a la investigación del fiscal Florentino Malaponte buscaba dilucidar el asesinato del hermano de Alan “Lamparita” y Lautaro Funes el pasado mes de febrero cuando salía de visitarlos en la Unidad Penitenciaria Nº 11, de Piñero. Pero los federales llegaron hasta los cinco jóvenes detenidos esta semana: no tienen relación directa con el asesinato de Bam Bam Funes, pero sí quedaron imputados por las armas y los estupefacientes secuestrados en su poder.
En el allanamiento en la casa del country se halló el siguiente arsenal: una pistola calibre 9 mm con cargador colocado y 15 cartuchos del mismo calibre, 25 cartuchos 380 mm, 11 municiones de 380 mm, una caja con 40 cartuchos calibre 40 mm y 47 cartuchos calibre 9 mm.
El fiscal Enrique Paz de la Unidad de Investigación y Juicio fue quien cargó a los cinco jóvenes con las mismas imputaciones, y el juez de Primera Instancia Héctor Núñez Cartelle aceptó la calificación legal y dictó diferentes aplicaciones: para Barea, prisión preventiva efectiva por 60 días; para Romero y Segovia domiciliaria por 60 días con controles policiales sorpresivos y periódicos, autorizando las salidas a Romero por controles y tratamientos médicos.
En tanto que a los otros dos jóvenes se les secuestró una escopeta calibre 1270 junto a 10 cartuchos del mismo calibre, 360 cartuchos calibre 22, un calibre 9 mm, 40 cartuchos calibre 40 mm.
Núñez Cartelle dispuso para los colombianos detenidos prisión preventiva por 58 días más, aunque a la chica le concedió cumplirla en su domicilio puesto que tiene un bebé a su cargo.