Quiso asaltar un kiosco, pero no había empleados ni dinero
Un ladrón intentó robar un kiosco de la localidad bonaerense de Hurlingham, pero escapó sin llevarse nada cuando descubrió que se trataba de un comercio "inteligente" en el que no había dinero ni mercadería al alcance de los clientes, ni empleados que atiendan en persona, informaron fuentes policiales este jueves.
El hecho se produjo en I-Shop Point, el primer local de este tipo creado en Argentina, ubicado en Avenida Roca entre Isabel La Católica y Belgrano, en el mencionado municipio del oeste del conurbano.
Se trata de un local que tiene en exposición detrás de vidrios toda la mercadería que vende y los clientes solicitan lo que necesitan mediante cámaras de video, tras lo cual se le entrega la mercadería a través de compartimentos en los cuales también tienen que dejar el dinero por su compra.
Sergio, el dueño del kiosco, explicó que en esta modalidad de venta hay una persona en una de las oficinas de la empresa, que se encarga de atender a los clientes a través de una pantalla, y al menos otra más detrás de los expositores del local, que prepara los pedidos y recibe y entrega el dinero, aunque también es posible pagar la compra con el teléfono celular.
Las cámaras de seguridad del kiosco registraron que en ese momento ingresó un hombre vestido de negro y con un casco para moto, haciéndose pasar por alguien que necesitaba abonar una factura de servicios a través del sistema de Pago Fácil.
Camila, una empleada que se encontraba atendiendo el local a distancia le advirtió a través de las cámaras de video que "no tenía sistema" para realizar esa transacción, y el delincuente comenzó a revisar las vitrinas y a abrir los buzones a través de los cuales se entregan los productos, en una actitud de aparente confusión.
"No te vas a poder llevar nada, no estoy ahí", le aclaró la joven a través del sistema, tras lo cual el hombre sacó una pistola que tenía guardada dentro de su campera y golpeó con ella uno de los compartimientos.
Según explicó esta mañana, un compañero suyo "activó la alarma con la cual se empieza a bajar la cortina" de metal del negocio, por lo que el ladrón salió y huyó corriendo.
Al conocerse el hecho, se iniciaron actuaciones de oficio para intentar dar con la identidad del delincuente, que quedaron a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Morón.
"Es la primera vez que nos ocurre, pero estoy muy tranquila y muy resguardada, tenemos toda la seguridad y cámaras por todos lados", explicó Camila.