La comisaría 21ª, en Arijón al 2300, volvió a ser escenario de una fuga de personas detenidas, pero esta vez con la particularidad de que el fugitivo fue un solo preso y que la evasión duró poco. Es que el hombre no tuvo mejor idea que huir rumbo a su casa y quedarse allí. El primer lugar adonde la policía fue a buscarlo.

El curioso incidente sucedió durante la madrugada de este viernes. Al parecer, el recluso en cuestión es un joven que había sido demorado por una situación que no trascendió. Estaba privado de libertad hasta que un fiscal definiera su situación procesal, pero entonces entrevió la posibilidad de ganar los techos de la seccional y escapar por las azoteas.

El fugitivo se perdió en las sombras de la madrugada y los guardias de la seccional lo advirtieron pasadas las 5 de la mañana.

Se armó un dispositivo de búsqueda, pero una patrulla enfiló derecho hacia el domicilio del evadido, en España y 5 de Agosto, barrio Las Flores.

Y ahí lo encontraron. El joven no intentó resistir ni volver a escapar, y se entregó manso de regreso al calabozo y ahora con una causa penal en firme y agravada.

La seccional policial de barrio Las Delicias fue también noticia en diciembre pasado, cuando se escaparon de allí 25 detenidos, de los cuales 9 fueron recapturados en las horas siguientes. También el año pasado hubo otras 3 evasiones. 

La capacidad del penal es para 12 personas, pero siempre hay más del doble. Un caso testigo de la cuenta pendiente del Ministerio de Seguridad, en erradicar la presencia de personas detenidas en comisarías policiales.