Carrefour sigue con la purga con el descanso dominical de fondo
Más de 100 trabajdores de la firma francesa se desayunaron con la noticia de no poder ingresar a sus puestos de trabajo. La empresa aduce caída en las ventas, pero el trasfondo es la ley de descanso dominical
La cadena Carrefour continuó esta mañana con la serie de despidos efectuados ante la inminente aplicación de la Ley de Descanso Dominical en Rosario, por lo que los trabajadores de todas las sucursales decidieron realizar asamblea permanente y no cubrir sus puestos de trabajo. Por lo tanto, las cinco sucursales mantienen sus persianas bajas.
La ofensiva de los hipermercados, que comenzó con los despidos de la cadena Coto el martes y continuó en horas de la tarde del miércoles con las firmas Jumbo y Carrefour, no mermó este jueves. A primera hora de la mañana en la sucursal de Necochea y 27 de Febrero, se les impidió el ingreso a unas 20 personas que se suman a otras 80 de la firma francesa.
El trasfondo es la ley de descanso dominical, por lo que se interpreta que los despidos es una forma de ejercer presión ante los fallos adversos de la justicia respecto de los amparos presentados por las cadenas.
“Me presenté en mi horario de trabajo y de casualidad lo hice con el gerente y el jefe de seguridad. Ambos me piden que no fiche y me explican que quedé sin el empleo por una cuestión de ajuste por el descanso dominical. Ni me llegó el telegrama”, narró en Sí 98.9, Hugo un empleado de la sucursal de zona sur.
Por el momento existe una lista de unos 20 empleados del turno mañana a quienes se les impidió el ingreso y de a poco reciben los telegramas correspondientes. Debido a esto, se decidió convocar a una asamblea permanente en los lugares de trabajo por lo que las sucursales no abrieron sus puertas al público.
El delegado de la sucursal, Gabriel Bernardi, explicó: “Estamos en asamblea permanente ante esta medida arbitraria que nada tiene que ver con el descanso dominical, porque es un plan de reestructuración que viene haciendo en varias localidades aduciendo bajas ventas. En Rosario hay unas 100 personas que se le niegan el ingreso, los telegramas recién están llegando, y encima con la mitad de indemnización”.