El gobernador Omar Perotti declaró, a través del Decreto Nº 1212, la emergencia sanitaria en materia de atención pediátrica y neonatológica en toda la provincia de Santa Fe, por el término de 90 días. La decisión se tomó por la crisis en que se encuentra el sistema de salud público a falta de profesionales en las distintas especializaciones para la atención sanitaria de los menores. La medida permite trasladar profesionales de salud y aumentarles la carga horaria para reforzar la atención en un contexto de “extrema gravedad” por falta de médicos.

Desde la provincia, argumentaron que la decisión se tomó para hacer frente a una “compleja situación “ante la alta demanda suscitada tempranamente producto de la creciente circulación de virosis respiratorias y bronquioloalveolitis, lo que ha generado una saturación de los sistemas de salud público y privado”. 

La Ministra de Salud tendrá la autoridad para crear módulos retributivos de pago correspondientes a servicios extraordinarios, respetando el límite máximo de compatibilidad fijado en el articulo 15º de la Ley N° 9282 (que versa sobre los escalafones para profesionales universitarios de la sanidad oficial), y también por la norma que regula a los Profesionales Universitarios de la Sanidad con especialidad en pediatría o neonatología, y el personal de enfermería y servicios generales.

Según trascendió, en la provincia hay unos 1600 médicos pediatras, aunque solo 300 hacen guardias. La mayoría están distribuidos entre Rosario y la Capital, dejando el resto de la provincia con una baja cobertura en el área. La preocupación crece con el aumento de las enfermedades respiratorias infantiles. De hecho, la la saturación de los sistemas sanitarios se produjo más temprano este año y hay lugares en los que ya no hay disponibles camas de Unidad Intensiva.