Las condiciones climáticas favorecen la asistencia a damnificados
El buen clima favorece tareas de reconstrucción y asistencia a damnificados en Córdoba
Las autoridades provinciales y municipales de Córdoba aprovecharon las buenas condiciones climáticas que imperaron durante el fin de semana para realizar tareas de reconstrucción y para asistir a las poblaciones afectadas por el temporal que se desató hace una semana y en el que murieron ocho personas.
Aprovechando que según los pronósticos no lloverá hasta el próximo martes, los miembros del Comité de Emergencia entregaron electrodomésticos, camas, colchones y alimentos en diferentes poblaciones de las Sierras Chicas, principalmente afectadas por la cantidad de agua caída, según informaron hoy desde Defensa Civil provincial.
En localidades como Agua de Oro, El Manzano, La Granja, Las Vertientes, Los Molles, Villa Animí y Salsipuedes, entre otras, se entregaron "heladeras, cocinas, lavarropas, mesas y sillas, y camas, además de módulos alimentario de 35 kilos", para las familias cuyas viviendas resultaron dañadas, dijeron.
El intendente de Salsipuedes, Sergio Cornejo, explicó a la prensa que "no hay actualmente personas con riesgo de vida o emergencia sanitaria", ya que las situaciones más severas fueron atendidas a través del plan de emergencia.
“Ya se llegó al 90% de las familias que estaban aisladas por las dificultades generadas por la rotura de puentes y caminos, y casi la totalidad de la población recuperó el servicio de energía eléctrica y de agua”, destacó el jefe municipal.
Asimismo, tras informar que en los centros públicos locales se entregan bebidas y medicamentos a las familias damnificadas, Cornejo subrayó: “aunque todavía hay mucho por hacer, el trabajo está muy coordinado”.
Por su parte, Mauro Moyano, encargado de la coordinación de la asistencia en Unquillo (Sierras Chicas), explicó que, en esa localidad, una de las más afectadas, se relevaron "400 viviendas, de las cuales el 15% sufrió destrucción total; un 40%, daños parciales, y el resto inconvenientes de menor gravedad".
Con anterioridad y luego de un relevamiento global en todas las localidades, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Passerini, había informado: “tenemos cerca de 1700 viviendas dañadas. Al menos un 15% necesitan ser reconstruidas en su totalidad”.
Asimismo, el funcionario destacó que están trabajando en "el plan de relocalización de la gente que se quedó sin hogar”, tras lo cual agregó que, mediante el Fondo de Emergencia que se ha creado para asistir a los damnificados, se dispuso de "una partida inicial de 150 millones de pesos, además de kits de materiales para la construcción de nuevas casas", que se están distribuyendo.
El temporal se desató hace una semana cuando, en la zona de las Sierras Chicas, por la intensidad de las lluvias, cayeron cerca de 300 milímetros en pocas horas, lo que generó la crecida de ríos y arroyos, que arrasaron personas, casas, puentes y caminos.
A raíz del temporal murieron ocho personas, la última de las cuales, Mariana di Marco (21 años), fue encontrada sin vida el viernes pasado, a unos 5 kilómetros desde el lugar donde el domingo pasado había desaparecido, arrasada por las aguas del río Ascochinga, cuando acampaba con otros tres jóvenes de un grupo de boy scouts en el paraje La Pampa, a 60 kilómetros de la capital cordobesa.