Por la ola de calor, el SIES atiende entre 5 y 7 casos diarios
La mayoría de las atenciones fueron a adultos mayores y fueron por casos leves con múltiples síntomas relacionados a las temperaturas extremas. A qué prestar atención y cuáles son los cuidados en estos días excepcionales.
Ante las altas temperaturas que se registran desde hace varios días, el Sistema Integrado de Emergencia Sanitario (SIES) registró un incremento en la demanda de consultas por golpe de calor, sobre todo en la zona céntrica, en sectores comerciales y en la zona bancaria de la ciudad. Todas las atenciones, en su mayoría de adultos mayores, fueron casos leves que registraron múltiples cuadros relacionados al aumento de las temperaturas. En los últimos días, el SIES atendió entre 5 y 7 casos diarios por golpe de calor.
En este sentido, desde la Secretaría Salud Pública recuerdan que el golpe de calor afecta a personas de cualquier edad, aunque muy especialmente a ancianas, ancianos y niñas y niños, por esto es importante priorizar la hidratación y la nutrición. Los síntomas de un golpe de calor son: dolor de cabeza palpitante, náuseas, temperatura corporal elevada, confusión, pérdida de conciencia, respiración y pulso rápido y fuerte, piel enrojecida, caliente y seca.
Ante cualquiera de los síntomas mencionados es importante consultar al médico, trasladar al afectado o afectada a un lugar fresco y ventilado, ofrecerle agua, quitarle la ropa y mojar con agua fría todo el cuerpo. No se debe administrar medicamentos antifebriles, ni tampoco friccionar la piel con alcohol.
-Ofrecerles agua o jugos naturales en forma frecuente sin esperar a que los pidan.
-Ofrecer el pecho más seguido a los lactantes.
-No dar líquidos o comidas calientes o pesadas.
-Bañarlos o mojarles todo el cuerpo con frecuencia.
-Proponer actividades tranquilas y evitar juegos intensos.
-Evitar que transiten y jueguen expuestos al sol.
-Si deben transitar bajo el sol, ponerles sombreros y usar protectores solares.
-Vestirlos con ropa holgada, liviana, de algodón y colores claros.
-Nunca dejar a los niños dentro de un vehículo estacionado y cerrado.
-No consumir bebidas con alcohol ya que aumentan la temperatura corporal y las pérdidas de líquido.
-Aumentar el consumo de líquidos sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
-Evitar esfuerzos físicos o actividades deportivas.
-Sentarse y descansar cuando sientan mareos o fatiga.
-Evitar comidas abundantes, ingerir verduras y frutas.
Para las ancianas y ancianos: es importante que descansen en lugares frescos y ventilados, desabrigarlos y ofrecerles líquidos aunque no manifiesten sed.
Es importante destacar que en los casos de no estar afiliado a un servicio de emergencia privado, llamar al 107, desde donde se evaluará su situación.