Vecinos de Pichincha estallaron contra la falta de controles en los bares del barrio
Reclaman ruidos molestos y ocupación de zonas no permitidas de las veredas, en el nuevo enclave gastronómico de la ciudad. "Vienen de Control Urbano a ver, pero nunca hacen nada", argumentaron.
La atracción este miércoles de uno de los bares de Pichincha en Alvear al 100 fue un DJ en vivo. Los vecinos del barrio, harto de reclamar contra los ruidos sin tener respuestas, fueron hasta el lugar y midieron los decibeles de la música. El sonido estaba mucho más fuerte de lo permitido y lo contaron en Twitter. Minutos después, subían otro Tweet que mostraba una respuesta por correo del área de Control Urbano de la Municipalidad: ante el reclamo que habían hecho, alguien del otro lado les respondió que el Disc Jockey estaba habilitado. "Es el reino del revés. Acá cuando hacemos la denuncia, nos terminan amenazando a nosotros ", dijo uno de los integrantes de la Vecinal Pichincha, en el móvil de la Sí98.9.
"Venimos de hace muchos años de quejas y la municipalidad hace oídos sordos. En la gestión de Fein, algo nos habían por lo menos escuchado, pero ahora no. Tenemos todo documentado en la cuenta 'Vecinos de Pichincha'. Cuando llamamos para avisar que hay ruidos molestos en alguno de los bares, a cualquier hora, nos responden al rato que no se constató nada. Pero a veces ni aparecen o vienen tres horas después, cuando el bar ya está cerrado", añadió el mismo vecino.
"Lo de anoche fue tremendo. Un bar chico, así común sin ninguna insonorización, había organizado una noche de música con DJ. Y lo tenían en la vereda con todo el equipo de sonido. La otra noche metieron una banda en vivo en Richieri y Güemes, en la vereda. calle. Y cuando pide poder salir, le dicen que espere que termine de comer la gente que queda sentada frente a su propia casa. ¡Es el reino del revés!" , agregó en diálogo con Nadie es Perfecto, por la Sí98.9.
Los vecinos de Pichincha aseguraron que hicieron un juicio a la Municipalidad por la Ley 10.000, de Intereses Difusos, para que se respeten las ordenanzas vigentes. "Lo ganamos en primera y en segunda instancia, o sea que la sentencia está firme. La Justicia ordena a hacer inspección y darle cada dos meses un informe al juez. No sé qué está esperando el intendente Javkin para cumplir con eso", finalizó uno de los damnificados, que pidió no dar su nombre por temor a represalias.